Rato niega toda responsabilidad del Gobierno en la estafa de Gescartera

El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo Rato, aseguró ayer en Lieja (Bélgica) que 'no existen responsabilidades políticas del Gobierno' en las irregularidades cometidas en Gescartera, la estafa de 18.000 millones de pesetas que ha originado ya dos dimisiones: la del secretario de Estado de Hacienda, Enrique Giménez-Reyna, y la de la presidenta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Pilar Valiente. PSOE e IU opinan lo contrario, tesis a la que se sumó ayer el Gobierno vasco.

'En este momento no veo ningún dato objetivo que indique que existe la responsabilidad política del Gobierno en esta cuestión, pero lo cierto, como he dicho en muchas ocasiones, es que no es el Gobierno el que tiene que depurar sus responsabilidades políticas, sino el Parlamento', declaró Rato en Lieja, la ciudad belga donde participa en la reunión del Consejo de Ministros de Economía de la Unión Europea. El vicepresidente segundo volvió a insistir en que 'hay partidos políticos, como el socialista, que nunca han reconocido responsabilidades políticas'.

Rato añadió que la CNMV, entidad fuertemente cuestionada por la actuación de algunos de sus miembros en la supervisión de la agencia de valores de Antonio Camacho, 'funciona perfectamente', con 'transparencia y eficacia', si bien admitió que 'habrá que sacar consecuencias para el futuro si se han cometido equivocaciones'. Para el vicepresidente segundo, Gescartera no es sino una 'estafa aislada, como la que se puede dar en cualquier lugar'.

La oposición insiste, por el contrario, en que ha existido connivencia entre el Gobierno y Gescartera. Así se expresaron ayer tanto Gaspar Llamazares, coordinador general de Izquierda Unida, como José Blanco, secretario de Organización del PSOE.

Este último se mostró convencido de que en el 'área económica' del Ejecutivo 'no podían ser desconocedores de lo que pasaba', por lo que ha exigido que Rodrigo Rato acuda al Parlamento a informar sobre las medidas adoptadas para evitar el fraude de los 18.000 millones. También debería explicar Rato a los parlamentarios, añadió el dirigente socialista, si conocía que Enrique Giménez-Reyna fue severamente multado por la CNMV antes de su nombramiento, a raíz de los comportamientos fraudulentos que se descubieron en una de sus empresas, Sefisur.

Por otra parte, el portavoz del Gobierno vasco, Josu Jon Imaz, resaltó en Vitoria la convicción del Ejecutivo autónomo de que las 'responsabilidades políticas' de este escándalo corresponden a 'aquellos que han nombrado a los responsables de la Comisión Nacional del Mercado de Valores y de la Secretaría de Estado de Hacienda', es decir, Rodrigo Rato y el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, 'y que además han consentido que los mecanismos de regulación y de garantía de los mercados no hayan funcionado'.