Random House anuncia su próxima unión con Mondadori en España
Peter Olson y Joaquín Estefanía analizan los problemas de la edición
Fueron dos intervenciones radicalmente diferentes, aunque el hilo conductor fuera el mismo, el del lugar de la palabra escrita en un mundo globalizado que se decanta a pasos agigantados por la inmediatez de lo audiovisual. Peter Olson, consejero delegado de Random House, división editorial de Bertelsmann, y Joaquín Estefanía, director de Opinión de EL PAÍS, hablaron ayer en El Escorial sobre edición y modelos de comunicación. Olson anunció la próxima unión con Mondadori dentro del mercado de habla hispana.
Joaquín Estefanía subrayó que adoptaba la perspectiva del periodista que debe lidiar con la información y, por tanto, trató de conflictos, de problemas, de contradicciones. Olson, en cambio, habló desde la posición que ocupa, la de máximo responsable de una empresa editorial que publica más de 3.000 nuevos títulos cada año y que forma parte de un grupo de comunicación, Bertelsmann, que aumentó sus beneficios en más de 100.000 millones de pesetas durante el último ejercicio. Olson anunció la próxima unión con Mondadori para cimpetir en el mercado de habla hispana.
La cuestión de fondo era analizar cuál era el papel de la letra escrita, ya fuera como libro o como prensa, en un panorama que ha cambiado drásticamente de valores y donde la dimensión cultural ha quedado en muchos sentidos eclipsada por el creciente predominio del entretenimiento en la industria editorial.
Estefanía se refirió a que muchos de los problemas que hace años padecía el mundo del libro empiezan a afectar ahora a la prensa escrita. Comentó que la necesidad de independencia económica y de lograr beneficios muchas veces entran en conflicto con la necesidad de ofrecer una información sofisticada, que cada vez es más cara. Durante su conferencia trató de distintos problemas que tienen los medios en España y en el resto del mundo.
Respecto a las cuestiones más próximas señaló las complicaciones derivadas del intervencionismo del Gobierno en distintos medios de comunicación, y el acoso que han sufrido algunos por su actividad independiente. En un orden más general, Estefanía señaló los conflictos que se derivan de las grandes concentraciones de medios muy diferentes bajo una misma empresa. Indicó que para poder trabajar con independencia es imprescindible tener las cuentas saneadas, pero que ese proceso de concentración puede producir una cierta autocensura en el periodista que debe informar sobre actividades de empresas del mismo grupo.
La búsqueda de beneficios de los distintos medios de comunicación ha empezado a generar, en algunos casos, propuestas a distintos redactores de tener acceso a stocks options dentro de los grupos en los que trabajan. La enmarañada red de conflictos épicos que este tipo de iniciativas pueden generar aún está por discutir. Finalmente, en la relación de los problemas con los que trata el periodista actualmente, destacó la creciente tendencia al amarillismo y citó un artículo de Vargas Llosa en el que el escritor se refería a este problema como una realidad de nuestro tiempo de la que no hay escapatoria posible.
Peter Olson confesó de inmediato en su conferencia que la visión que iba a dar del mundo de la edición en los próximos años iba a ser optimista. Y lo fue. Habló de independencia, de diversidad, de creatividad. Su argumento fundamental fue que las nuevas tecnologías, más que obstaculizar, abren nuevas posibilidades de acercamiento a los múltiples intereses de los lectores y que, por tanto, conducen a una mayor diversidad en la oferta de contenidos.
Más que globalizada, dijo Olson, dentro de Random House la edición de libros es multilocal. Aludía así a las diferencias que existen en los sellos de cada país y a las diferentes propuestas que cada editor. En cuanto a las nuevas tecnologías, Olson habló de una suerte de archivo digital que es capaz de ofrecer actualmente mucha mayor información a los lectores, dentro de soportes diferentes, lo que permite, a la larga, afrontar los decisivos retos de captar nuevos lectores teniendo la posibilidad de ir probando diferentes propuestas para conocer sus verdaderos intereses.
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