Chirac y Putin critican a EE UU por alterar el equilibrio estratégico
Los presidentes de Francia y Rusia, reunidos en Moscú
Los dos presidentes coinciden en que hay que garantizar la estabilidad estratégica en el mundo en las nuevas condiciones surgidas tras la guerra fría, pero hacen notar que 'los mecanismos para estos equilibrios existen actualmente'. Chirac y Putin se cuentan entre los líderes mundiales que se oponen a que el mundo bipolar de la guerra fría dé paso a otro en el que haya una sola superpotencia: Estados Unidos.
Ambos son partidarios del concepto de multipolaridad, al que también se adhiere China. Para lograrlo, consideran que no hay que romper la baraja, es decir, cambiar el actual entramado de tratados de desarme y reemplazarlo por 'un sistema menos vinculante' que temen que abra el camino a una nueva carrera de armamentos. En su opinión, la 'contención nuclear', basada en el 'principio de suficiencia', sigue siendo clave para la estabilidad estratégica, al igual que los tratados de desarme y de no proliferación.
En la conferencia de prensa posterior a la cita en el Kremlin de los dos presidentes, Chirac insistió en que reemplazar un sistema vinculante, como el vigente, por prácticas voluntarias 'no cambiaría las cosas para mejor'. Putin aseguró que hay que mantener a toda costa el ABM.
Desde la cita en la cumbre de Putin y George Bush en Liubliana, el 16 de junio, cuando las buenas palabras y el inicio de una aparentemente amistosa relación personal no se tradujeron en hechos concretos, el líder del Kremlin ha dado pruebas sobradas de que su posición se mantiene inalterable. Podría llegar a aceptar algunos cambios en el ABM, pero no los que pretende Bush, por entender que supondrían la muerte de un tratado que ha sido la clave del equilibrio estratégico y el proceso de desarme durante los últimos 29 años.
Como muestra de su determinación a responder al desafío de Bush, Putin ordenó hace una semana el lanzamiento de prueba de un misil SS-19 capaz de transportar hasta seis cabezas nucleares, y anunció que esa vieja fórmula (barata, aunque rompería los tratados START) podría ser la respuesta rusa a la 'miniguerra de las galaxias' norteamericana. Una 'dialéctica' con preocupantes ecos de guerra fría.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Escudo antimisiles
- Vladímir Putin
- Jacques Chirac
- ISD
- Espacio aéreo
- Declaraciones prensa
- Tratado ABM
- Ejército aire
- Tratado nuclear
- Política defensa
- Seguridad aérea
- Tratados desarme
- Armas nucleares
- Fuerzas armadas
- Rusia
- Estados Unidos
- Francia
- Europa este
- Armamento
- Europa occidental
- Política exterior
- Transporte aéreo
- Gente
- Defensa
- Europa