El número de pensionistas ha aumentado casi un 24% en los últimos 10 años, a pesar del descenso de población

El número de pensionistas ha experimentado a lo argo de los últimos diez años un crecimiento de casi el 24% en el País Vasco a pesar de que se ha asistido a un descenso paralelo de la población. Este incremento, superior en tres puntos porcentuales a la media española, tiene su origen, entre otras razones, en el aumento de la esperanza de vida.

Un total de 426.637 ciudadanos vascos tienen la condición de pensionistas y recibe mensualmente de las instituciones públicas algún tipo de subsidio por jubilación, viudedad, incapacidad u orfandad o favor familiar, según los datos del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) correspondientes a diciembre del año 2000. Esta cifra supone un crecimiento del 1,2% sobre el anterior ejercicio y del 23,9% en relación al año 1991.

El aumento de los pensionistas no constituye un hecho aislado del País Vasco, sino que se trata de un fenómeno generalizado en el conjunto de España. No obstante, se observa que el crecimiento de pensionistas ha tenido mayor intensidad en la última década en Euskadi que en el conjunto del Estado (un aumento del 23,9% frente a un 20,6% más, respectivamente). Por provincias, se registra un mayor aumento de pensionistas en Álava que en Vizcaya y Guipúzcoa.

Las pensiones vascas representan el 5,6% del total de las que existen en España. Sin embargo, y debido a la mayor paga media que reciben los pensionistas vascos, las pensiones de Euskadi concentran casi el 7% del gasto total por este concepto del Estado. Concretamente, se destinan mensualmente a los pensionistas vascos aproximadamente 43.000 millones de pesetas. La pensión media en Euskadi ascendía a finales del pasado ejercicio a 99.000 pesetas frente a las 78.418 pesetas de la media española.

Esta diferencia está presente en todas las modalidades de pensión, aunque resulta especialmente importante en las de jubilación e incapacidad (en ambos casos la diferencia se sitúa en torno al 30%). En el resto, la distancia disminuye a cerca del 15%.

Más de la mitad de las pensiones vascas (el 59%) corresponden a la modalidad de jubilación y, como es lógico, concentra la mayoría del gasto. Le sigue la modalidad de viudedad, que agrupa a alrededor del 27% del total.