El consumo de genéricos se sitúa por debajo del objetivo del Ministerio de Sanidad

El fomento del uso de genéricos es una 'prioridad' para recortar el gasto farmacéutico, según insistió ayer José Félix Olalla, subdirector general de Medicamentos. Olalla recordó que frente a las 41 especialidades aprobadas en 1997, en lo que va de 2001 se han aprobado 160, casi tantas como en todo 1999 (ver gráfico). En total, ya se han autorizado 753 presentaciones correspondientes a 74 principios activos.

El gasto en medicamentos fue en 2000 superior al billón de pesetas (el 25% del total del presupuesto del Ministerio de Sanidad), un 7,5% superior al de 1999. Este incremento fue el menor de la última década. Durante los diez años anteriores nunca había crecido por debajo del 10%, lo que llevó a los sucesivos gobiernos a adoptar una serie de medidas para reducirlo, como el recorte de los beneficios de fabricantes y farmacias o la exclusión de medicamentos de la lista de los subvencionados por la Seguridad Social.

Últimas decisiones

Las últimas decisiones fueron impulsar el mercado de genéricos y establecer un sistema de precios de referencia para algunos de los fármacos más consumidos, según el cual el Sistema Nacional de Salud sólo subvenciona las recetas de una lista de medicamentos cuyo importe esté por debajo de un máximo establecido. Si el paciente se lleva ese producto, paga un 40% de su importe (salvo si es jubilado, que no paga nada, o si es crónico, que abona el 10%). Si quiere comprar el fármaco indicado en la receta, y éste es más caro que el precio de referencia, debe pagar la diferencia. Durante el primer trimestre de 2001, el incremento del gasto farmacéutico fue el menor de los últimos 12 años, y se quedó en el 5%.

La anterior subdirectora general de Planificación Farmacéutica, Nieves Martín, reconoció ayer que el consumo de genéricos se había 'estancado' después del empujón que supuso la entrada en vigor del decreto de precios de referencia el 1 de diciembre pasado, y destacó que su utilización en atención especializada era 'testimonial'. De todas formas, según Martín, que abandonó su cargo hace dos semanas después de ocho años de ejercerlo, todavía es pronto para saber si se trata de un fenómeno estacional o una tendencia firme. 'De momento, se está produciendo un ajuste de la situación', afirmó.

Los médicos no parecen muy preocupados por los precios de referencia. Un estudio realizado por Sigma Dos para Ratiopharm, principal fabricante de genéricos, y presentado ayer, señala que aunque un 67% de los facultativos receta genéricos, el 58% no se fija en si su importe está por encima o por debajo del máximo subvencionado por el Gobierno, y prescribe, simplemente, 'el que le parece mejor'.

Respecto a las farmacias, éstas habían pasado de vender una media de 25 cajas de genéricos cada mes en el segundo trimestre de 2000, a dispensar 147 unidades de esos productos.

Fuentes de los fabricantes señalaron que el descenso en la prescripción de genéricos se debe a que las medidas adoptadas fueron 'coyunturales'. 'Al Ministerio no le importa fomentarlos, y el efecto de este desinterés ha empezado a notarse ya', señalaron. El presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Especialidades Genéricas (Aeseg), Guillermo Sada, recordó que el anuncio de la entrada en vigor de la ley ya implicó un descenso del precio de las especialidades para las que había un precio máximo subvencionado del 14%, lo que supuso un ahorro añadido para Sanidad de 25.000 millones de pesetas.

Uno de los factores decisivos para extender el uso de medicamentos genéricos es que se conozcan. Según afirmó ayer Nieves Martín, el 80% de la población ya sabe lo que son los genéricos. La cifra parece un poco optimista. En julio de 2000, de acuerdo con un trabajo realizado para Ratiopharm, sólo los conocía el 48%, y un 72% de los farmacéuticos indicaba que los clientes mostraban algún inconveniente a la hora de recibir esos medicamentos. Una encuesta de Voxpública efectuada entre mayores de 60 años refleja que en diciembre de 2000 el porcentaje de quienes sabían lo suficiente sobre estos productos había subido al 51%.

También ha aumentado la prescripción. En julio, un 14% de los pacientes había recibido una receta de genéricos. Este porcentaje ha subido al 32%. Pese a ello, afirmó Sada, mientras los genéricos no lleguen como mínimo al 5% de los medicamentos consumidos, los fabricantes no tendrán nada que ofrecer al panorama sanitaria español.