El euro pierde terreno tras la decisión del banco central

El euro sufrió ayer un retroceso inmediato tras conocerse la decisión del BCE de mantener los tipos de interés en el 4,75%. La moneda europea llegó a caer hasta 0,8813 dólares, 188,80 pesetas por dólar, en un movimiento que expresaba más la equivocación de los inversores respecto de las intenciones del BCE que la decepción por una medida anunciada. El cambio oficial del euro fue de 0,8840 dólares.

Los responsables del BCE habían mantenido en las últimas semanas su firme voluntad de 'esperar y ver' respecto de la evolución de la economía, pero advirtiendo siempre de que lo prioritario eran los precios, es decir, mantener el poder adquisitivo de los ciudadanos.

La acumulación en estos días de anuncios de revisión a la baja de las perspectivas de crecimiento en la UE desvió el consenso del mercado hacia las posiciones favorables a un descenso del precio del dinero, curiosamente esgrimidas por los institutos económicos alemanes, hasta ahora los más firmes defensores de una política de precios estables. La inflación de Alemania publicada el martes, en el 2,5%, aunque con un descenso de una décima sobre el dato del mes anterior, ya era un argumento de peso en favor de la política del BCE de no dejarse llevar por la coyuntura. Otro dato a tener en cuenta fue el incremento de una décima en la tasa de inflación española, hasta el 3,9%, que fue conocido ayer.

Reacción de las bolsas

La reacción de las bolsas fue neutra, demostrando así que los inversores de estos mercados ya contaban con el mantenimiento del precio del dinero en los niveles actuales, debido a los numerosos mensajes de los responsables del BCE en ese sentido. La Bolsa de Madrid subió el 0,20%, y el Ibex 35, el 0,13%, mientras que París subía el 0,57%, y Francfort, el 0,63%. Londres perdió el 0,26%.

Las perspectivas de crecimiento anunciadas en los últimos días sitúan a la UE por delante de Estados Unidos y parece que el BCE no quiere alterar ese desequilibrio favorable introduciendo nuevas presiones inflacionistas. Los responsables del banco central europeo ya habían anunciado meses atrás que la inflación seguiría alta durante algunos meses debido por al encarecimiento del petróleo.