Gobierno, sindicatos y patronal buscan un pacto sobre pensiones en 15 días

Tampoco hay nuevas concreciones en el resto del documento. Camps manifestó que el Gobierno mantiene como principio que en el futuro habrá que tener en cuenta las cotizaciones de toda la vida laboral para el cálculo de la pensión, pero 'la plasmación de ese principio a un eventual acuerdo se va a negociar'. Con ello dio a entender que no renuncian, pero que tampoco va a ser objeto de discordia. Los sindicatos puntualizaban que el Gobierno sabe cuál es su postura, es decir, que ahora no van a aceptar aumentar de 15 a 35 años de ese periodo de cálculo.

La petición de las centrales de abrir el derecho a la jubilación anticipada también se va discutir a partir de un papel en blanco. Tras ello, el representante de UGT, Pedro Díaz Chavero, dijo que esta negociación es 'muy importante para el futuro del diálogo, resquebrajado como consecuencia de la reforma laboral decretada por el Gobierno' el pasado 2 de marzo. Y su conclusión de esta reunión es que 'el Ejecutivo ha dado satisfacción plena a los sindicatos en sus propuestas de negociación, aunque todavía hay que matizarlas'. En similares términos se expresó el dirigente de CC OO José Luis Sánchez: 'La coincidencia de todos en que el diálogo sea intenso y con contactos que siguen mañana [por hoy] mismo'. El plazo que se han dado, según el secretario general de la CEOE, Juan Jiménez Aguilar, es de 15 o 20 días para 'concluir la discusión y, si es posible con acuerdo, aún mejor'.

En ese debate deben abordar también la propuesta de la CEOE en la que no hay identidad de criterios: la rebaja de cotizaciones a la Seguridad Social. La patronal argumenta que hay margen suficiente por el excedente que tiene el sistema público. Ante ello, el Gobierno sostiene que no quiere aplicar una reducción generalizada de cuotas, sino mantenerla con carácter selectivo para estimular la contratación estable.

Sí están de acuerdo las tres partes en la estructura del sistema de Seguridad Social y en culminar la separación de las fuentes de financiación, de forma que con las cotizaciones se paguen las prestaciones contributivas y la cobertura asistencial sea financiada por el Estado vía impuestos. Con ese objetivo prevén fijar un compromiso para que los Presupuestos de los próximos años vayan ampliando la aportación estatal al complemeneto de mínimos (ahora situado en 652.132 millones de pesetas), de forma que asuma totalmente el coste en un periodo que para los sindicatos no debe superar los ocho años, para la patronal puede ser de nueve y para el Gobierno de 12 años.

En relación al fondo de reserva de las futuras pensiones, que ahora cuenta con 100.000 millones de pesetas, hay consenso para aumentarlo progresivamente y llegar a una cantidad equivalente a una mensualidad de pensiones con el prorrateo correspondiente de pagas extras. Para alcanzar esa cifra, las centrales apuntan que el plazo debe coincidir con la actual legislatura y la CEOE sugiere 'un plazo amplio' para que no se agote todo el excedente en ese fondo de reserva y quede margen para rebajar las cotizaciones. Como continuación del anterior pacto de pensiones de 1996, también hay propósito de que ahora se aplique una nueva mejora de las pensiones mínimas tanto de jubilación como de viudedad y de orfandad.