La Ertzaintza investiga a una banda profesional de delincuentes kosovares que roba en polígonos
La Ertzaintza estima que la banda de los kosovares está formada por unos 25 miembros, en su mayoría militares que lucharon en la guerra de Bosnia, y también por policías blacánicos. Su pista se perdió a finales del pasado año cuando dejaron de robar en naves industriales del País Vasco. Hasta entonces y durante dos años, la organización, que dispone de armas de guerra y sistemas tecnológicos de alta precisión, había desvalijado con gran profesionalidad decenas de locales.
Un informe policial reservado señala que sólo del 24 de noviembre de 1999 al 1 de febrero de 2000 se registraron un total de 92 denuncias por robos presuntamente perpetrados por este grupo. La banda llegó a saquear en un mismo día cuatro polígonos en Oiartzun y en otra ocasión cometió igual número de robos en Vitoria, también en una sola jornada.
Las primeras pesquisas sobre los robos del último mes apuntan a que sus autores son otros, aunque el sistema que emplean es similar al de aquella banda. 'Pero estos son simplemente delincuentes, aunque también actúan en naves industriales. Son albanokosovares con documentación italiana', según las fuentes informantes.
Varios de los atracos han sido cometidos en Derio, Amorebieta, Gernika y Sondika. En esta última, la organización actuó como siempre: por la noche. Los ladrones penetraron en un pabellón por el alcantarillado. Cortaron los cables para inutilizar las alarmas y se apoderaron de un ordenador valorado en unos 50 millones y otro material tecnológico. El resto de robos han sido similares.
'Las actuaciones recuerdan a la de la banda de los kosovares. Todavía está en curso la investigación policial y judicial sobre esa organización, que es absolutamente peligrosa', dicen fuentes policiales vascas.
Hasta 58 automóviles
El citado informe interno detalla hasta 58 vehículos que fueron utilizados por la primera banda. La policía vasca llegó a identificar a algunos de sus presuntos componentes: Naip Rexhepi, Hajdis Poreni o Christos Xphetog, entre otros.
Esta banda cometió sus primeros robos en Guipúzcoa y el norte de Navarra y después se extendió por Álava, una de las zonas más castigadas, con una treintena de acciones en un mes, y Vizcaya. La Ertzaintza llegó a elaborar un mapa con el número de robos en relación con las denuncias presentadas.
Sus últimos golpes antes de que dejaran de actuar se produjeron en Eibar, Ermua, Basauri y Muskiz.
'Son muy peligrosos'
'Son auténticos profesionales, muy peligrosos, que disponen de subfusiles, escáner, telefonía móvil y buenos vehículos, de su propiedad y alquilados. Siempre actúan de noche, a modo de comandos; unos entran y otros vigilan en el exterior. Usan entotal cuatro o cinco coches. Limpian las naves y se marchan', explican fuentes de la policía vasca sobre la actuación de la banda de los kosovares. Sus actuaciones tenían al comienzo como objetivo recaudar fondos para mantener la guerrilla que actuaba en ese territorio. Sin embargo, pronto esta intención dejó paso a otras. Medios de la Ertzaintza señalan que empezaron a implicarse en los círculos de prostitución, utilizando a las mujeres en tareas de información, y también en redes de tráfico de drogas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.