Calatrava construirá el cuarto puente de Venecia

El Ayuntamiento de Venecia ha dado finalmente luz verde al proyecto de puente presentado hace cuatro años por el arquitecto valenciano Santiago Calatrava, que unirá dos orillas del Gran Canal en la ciudad lacustre. Se trata de un arco de cristal y acero de 91 metros de longitud y una anchura entre los seis y los nueve metros, iluminado por potentes luces que se reflejarán en el agua. Las obras de este cuarto puente sobre el Gran Canal comenzarán este verano con la intención de que el puente, una especie de pasarela de luz, como la define su autor, esté listo dentro de un año.

'Mi obra será ligera, nítida, recta y respetuosa con el Gran Canal', declaraba ayer el arquitecto a Il Corriere della Sera, el diario milanés que recogía la noticia. 'Contribuirá además a cambiar el aspecto de la ciudad', añadía Calatrava, un ingeniero-arquitecto muy estimado en Italia. El nuevo puente enlazará la zona del terminal de automóviles del Piazzale Roma con la zona de la estación ferroviaria. Es decir, unirá un área de 'periferia interna' como la califica el arquitecto Vittorio Gregotti, con el centro de la ciudad.

El proyecto Calatrava había partido con poco entusiasmo hace cuatro años, apoyado sobre todo por el ex alcalde de la ciudad, Massimo Cacciari. Pero Venecia, sobrecargada de arte e historia, ha mirado siempre con desconfianza este tipo de proyectos innovadores. Ahora, sin embargo, contra todo pronóstico, el ayuntamiento de centro-izquierda que preside Paolo Costa ha dicho sí a un puente que costará en torno a los 900 millones de pesetas. El presidente de la región Veneto, Giancarlo Galan, se ha mostrado favorable a la iniciativa y ha propuesto la compra de uno de los edificios históricos que quedará al pie del puente. Galan quiere transformarlo en la nueva sede de varios departamentos del Gobierno regional.

De esta forma, lejos de ser una obra 'bella e inútil', como la calificó el arquitecto Carlo Aymonino, la nueva pasarela sobre el Gran Canal hará posible la comunicación entre la parte moderna y la parte antigua de la ciudad.