Léger millonario y el misterio Malevich

'Me gusta el olor de Arco', decía ayer una visitante a la entrada del pabellón 5. Será el olor de los dólares, con unas cifras que se comunican en voz baja y que se niegan a traducirse a euros o pesetas. El escándalo es un cuadro de Kasimir Malevich, el ruso que se inventó el movimiento suprematista para llevar una geometría sencilla y radical al arte abstracto. La pieza se encuentra en el almacén de la galería Gmurzynska, de Colonia, y no sueltan cifra alguna. Sólo informan que no se expone porque lo quería ver un cliente y 'sólo se ha enseñado a dos museos y dos coleccionistas', además de Ana Botella. Varios galeristas han coincidido en la cifra de 11 millones de dólares (1.980 millones de pesetas). La galería asegura que 'no es tanto', pero añaden que se trata de una pintura suprematista excepcional, que no se ha vendido. El público puede ver cuatro dibujos de Malevich, entre 1914 y 1920, uno de ellos con punto rojo. Al lado, la galería Metta, de Madrid, muestra una Composición suprematista, de 1920, por 14 millones de pesetas.

El pintor Fernand Léger tenía ayer el récord de esta edición, con la venta de una Composición sobre fondo azul, de 1935, por 240 millones de pesetas, en la galería Patrice Trigano, de París, donde han vendido cuadros de Miró, Masson y Valdés. Otro léger se ofrece en la Marlborough por 117 millones, el mismo stand que cierra piezas de Barbara Hepworth (30 millones) y Manolo Valdés (20 millones). Las ventas millonarias encontraron ayer varias obras de Torres-García, en la galería Leandro Navarro, de Madrid, con dibujos (unos siete millones pieza) para el Museo Municipal de Madrid y la Fundación Mapfre, y un viñes (5 millones) para el Reina Sofía. La Fundación Arco compró Yinka Shonibane por 3,5 millones.