_
_
_
_
OPINIÓN DEL LECTOR
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

La Plaza Nueva, el inconmensurable patio

En un artículo publicado en la prensa J. M. Barandiarán se muestra preocupado porque el Ayuntamiento de Bilbao ha decidido hacer cumplir la normativa referente a la instalación de terrazas y veladores en la Plaza Nueva de Bilbao. Según esas normas los hosteleros tienen permiso para instalar mesas y sillas durante nueve meses, pero hasta ahora habían hecho caso omiso. ¿Acaso es incorrecto que se haga cumplir la normativa?

A J. M. Barandiarán le parece raro que los vecinos de la plaza protesten, por ejemplo, porque en muchas ocasiones se supere el nivel de ruidos permitido e ironiza haciendo un absurdo símil con los vecinos que viven en las cercanías del estadio de San Mamés. ¿Es que cualquier ciudadano, habite donde habite, no tiene derecho a vivir 'en paz'?

Sería el colmo que se negara un derecho tan elemental y, desde luego, resulta del todo incomprensible que una persona que al parecer es pedagogo abogue por algo así como 'mientras yo esté a gusto, que se fastidien los demás'.

Además de ridiculizar a los vecinos de la plaza por, simplemente, hacer valer nuestros derechos, el articulista se permite llamarnos jauntxos, ya que, según su opinión, queremos convertir el asunto en un mero tema de patio de vecindad (por otra parte, no vendrá mal recordar que los soportales de la Plaza Nueva no son propiedad del Ayuntamiento, quien sólo posee un derecho de servidumbre, en virtud del convenio firmado con los propietarios el 17 de mayo de 1821). La Plaza Nueva es de hecho el gran patio de todas las viviendas erigidas en la misma, pero es evidente que, al mismo tiempo, es el inconmensurable patio de infinitas actividades y actuaciones: Semana Grande, Carnavales, Santo Tomás, mercado-rastro de domingos y festivos, presentaciones, mítines, rifas... ¿No parece lógico que quienes allí vivimos tratemos de que se compaginen los múltiples usos con el respeto al carácter de ser un monumento histórico-artístico y, al mismo tiempo, residencial?

Los vecinos de la Plaza Nueva no nos oponemos a las actividades que tradicionalmente se han venido realizando en la misma, tampoco nos oponemos a la instalación de terrazas y veladores, pero exigimos que se habiliten los mecanismos reguladores necesarios para que se pueda alcanzar el adecuado equilibrio.

Para finalizar, ya que J. M. Barandiarán está preocupado porque no puede elegir dónde ubicar su ipurdi (sic), puntualizar algo que es obvio: en todo el espacio central de la plaza existen unas largas bancadas que posibilitan disfrutar agradablemente de la compañía y el entorno.-

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_