La rebaja fiscal del gasóleo profesional se prorroga dos años
La oposición de Irlanda, vapuleada por el resto de los Quince por desviarse de las orientaciones generales, impidió un acuerdo sobre la vigencia de las rebajas de los impuestos especiales sobre hidrocarburos. Ante ellos, los ministros de Economía y Finanzas de la UE decidieron prorrogar seis años las exenciones fiscales y rebajas de impuestos propuestas por la Comisión Europea para los carburantes y dos años la reducción en el gasóleo profesional acordada durante la reciente crisis del carburante el verano pasado en Francia, Italia y Holanda.
Hace escasamente un mes, Bolkestein amenazó al Ecofin con procedimientos de infracción contra los países que apliquen las rebajas sin ser previamente autorizadas por el Consejo de Ministros. Un total de 36 medidas fiscales carecían de base jurídica desde el 1 de enero y la Comisión las consideraba, por tanto, ilegales. El Ecofin de enero sólo fue capaz de ponerse de acuerdo en las líneas maestras presentadas por la presidencia sueca para alcanzar el consenso.
'Se ha demostrado que, siendo flexibles, se puede alcanzar un acuerdo de los Quince. Si no se hubiera llegado a ningún acuerdo, habría empezado a mandar cartas de requerimiento oficiales mañana y, como hemos llegado a un acuerdo, ya no habrá que hacerlo', declaró el comisario. Bruselas no estaba dispuesta a permitir 'un limbo' en la imposición de los carburantes.
La cuestión más conflictiva era la rebaja pactada en Francia, Italia y Holanda con los transportistas por el elevado precio del carburante. Al final se acordó que se acabará dentro de seis años con las prórrogas automáticas existentes, salvo en la del gasóleo profesional, que tendrá dos años de excepción. 'Se ha regularizado la situación', se felicitó la Comisión. En España se aplican tres exenciones fiscales en los carburantes: los GLP para taxis y transporte público, en los aceites usados para combustibles y una diferenciación de tipos de la gasolina sin plomo según el octanaje.
Vigilar la competencia
La Comisión confirmó ayer, por otra parte, que ha enviado cuestionarios a determinadas empresas del sector petrolero para verificar si las condiciones de competencia son conformes a la reglamentación comunitaria y poder identificar eventuales prácticas desleales. Bruselas espera una respuesta para antes de final de mes.
Los servicios europeos de la Competencia explicaron que esta petición se encuadra en la investigación iniciada en septiembre para ver si las compañías distribuidoras y productoras de carburante están llegando a acuerdos, tanto en el ámbito nacional como en el comunitario, que pongan en peligro el correcto desarrollo de la competencia.
