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Cultura ultima la compra de la finca donde Lorca pasó sus últimas horas

El entorno de la carretera entre Víznar y Alfacar es quizá el último tabú sobre la guerra civil que ha prevalecido más de sesenta años después del fin de la contienda fratricida. Unas 3.000 personas fueron fusiladas allí en los meses inmediatos al alzamiento de los rebeldes contra la República, pero ningún símbolo ni aviso da cuenta de la existencia de ese inmenso cementerio. Todavía, furtivamente, aparecen junto a las fosas ramos de flores.

La Consejería de Cultura emprendió hace dos años una complicada negociación con los dueños de la finca donde se alzaba La Colonia -una construcción entonces destinada a acoger a grupos de niños durante las vacaciones estivales- y preservar de ese modo la memoria de las miles de personas que pasaron allí sus últimas horas.

El edificio original fue demolido, como otros tantos inmuebles vinculados a la biografía lorquiana, a comienzos de los ochenta. Ian Gibson, en su biografía de García Lorca, sostiene que el poeta fue recluido allí un día antes de su muerte, el 19 de agosto de 1936, y que uno de los vigilantes le reveló el fin inminente e incluso le ayudó a rezar unas oraciones.

A escasos centenares de metros de allí, la Junta de Andalucía tuvo que intervenir hace tres años para paralizar las obras emprendidas por el Ayuntamiento de Alfacar, de mayoría socialista, para construir un campo de fútbol. La zona ha sido reparada dentro de lo posible y aunque su aspecto, después de soportar los movimientos de tierra, no será ya el mismo, al menos no estará ocupada por una instalación deportiva.

Otros cientos de metros más adelante, cerca de la Fuente de las Lágrimas, llamada por los árabes Aynadamar, está situado el último elemento que recuerda la feroz represión nacionalista. Es el parque de García Lorca, urbanizado hace años por la Diputación Provincial y donde se encuentra el olivo bajo el cual se supone que está enterrado el poeta. La compra de la Colonia completa y devuelve la dignidad histórica a aquellos parajes.

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