Miles de comercios echaron el cierre en protesta por la ampliación de horarios

Miles de pequeños y medianos comercios, el 85% de los cerca de 90.000 que existen en la región, según las patronales Cecoma y Unipyme, cerraron ayer sus puertas en protesta por la decisión de la Consejería de Economía de ampliar de 14 a 18 (incluidos todos los domingos de agosto) el número de festivos en los que se permite la actividad comercial. Este nuevo paso en la liberalización de los horarios pone al sector del pequeño comercio en una posición cada vez más difícil para competir con las grandes superficies, las cuales, gracias a su volumen de negocios y de personal, pueden permitirse abrir en festivo sin sufrir pérdidas ni sacrificar el descanso semanal.

El paro patronal, calificado de 'éxito absoluto' por los empresarios -los sindicatos se descolgaron de la convocatoria hace dos semanas-, tuvo desigual seguimiento en el conjunto de la región. En la capital, 'el 85% de los comercios y el 100% de mercados y galerías de alimentación' echó el cierre, según Cecoma y Unipyme, aunque hubo zonas, como el distrito Centro, en las que la respuesta superó a duras penas el 25%. Economía no hizo ninguna valoración sobre la protesta.

Los municipios de la periferia tampoco actuaron de forma uniforme. Al 'cierre masivo' de la zona sur (Alcorcón, Getafe, Leganés o Pinto) se opuso la escasa participación (cerca del 20%) en Alcalá de Henares, una localidad rodeada de grandes superficies y en la que los pequeños comerciantes llevan años movilizándose.

Dueños de establecimientos y algún consumidor 'solidario' se manifestaron por la tarde para reivindicar las bondades de la fórmula tradicional del 'gremio' frente a la 'sociedad de consumo y estupidez' representada por las grandes superficies.