Una lista que ofende a las familias
Existen graves contradicciones entre las cifras oficiales y las obtenidas por los civiles
La información entregada por los militares chilenos -180 desaparecidos, a los que hay que añadir una veintena enterrada en una fosa en la región metropolitana de Santiago- ha provocado conmoción en la sociedad chilena y especial indignación en los familiares de las víctimas. Rápidamente han aflorado las denuncias de graves contradicciones entre los datos facilitados por las Fuerzas Armadas y los obtenidos por los familiares tras largos años de averiguaciones.
- Carmen Hertz, abogada querellante contra Pinochet y viuda del periodista Carlos Berger, asesinado en la caravana de la muerte, relató a este diario algunas de las inconsistencias más flagrantes: 'Haroldo Cabrera Abarzúa, gerente general de la empresa del cobre de Chuquicamata, también formaba parte de las víctimas de la caravana de la muerte. Trece de ellos fueron identificados después de encontrarse restos en una fosa clandestina del desierto. En aquella fosa se halló un dedo que permitió identificar que pertenecía a Cabrera, a través de los peritajes correspondientes. En el informe de las Fuerzas Armadas aparece arrojado al mar. O sea, le cortaron un dedo, lo enterraron en la fosa y luego tiraron el cadáver al mar. Es algo escabroso'. 'Aquí se ha entregado una línea, una línea de información, en la que se dice 'lanzado al mar, frente a...', y eso se rellena con el nombre de Concón, San Antonio, Tocopilla, Pisagua, según el lugar. Eso es todo lo que han dado. En algunos casos se da la fecha y el lugar de detención, sacada del Informe Rettig, copiando literalmente los datos', añade Carmen Hertz.
- Lenin Díaz Silva, joven dirigente del Partido Comunista, detenido el 9 de mayo de 1976. 'Está demostrado en el proceso que se siguió que fue secuestrado por la DINA ese día. Según todos los antecedentes en poder de los organismos de derechos humanos, Díaz estuvo recluido en Villa Grimaldi, centro de detención y tortura, al menos un mes y medio después de su detención. Hay testimonios fidedignos que lo ven en Villa Grimaldi a finales de junio. La información que se le entrega a la familia es que Lenin Díaz fue lanzado al mar el mismo día de su detención, el 9 de mayo'.
- El grupo de la Moneda. Domingo Blanco Tarrés, jefe de la escolta presidencial de Salvador Allende, llamado Bruno. Fue detenido frente a la sede presidencial. La Policía de Investigaciones lo trasladó a la cárcel pública de Santiago. Su ingreso en el recinto penitenciario el mismo día 11 consta en el libro de ingresos, según se pudo comprobar en el proceso sobre este caso, así como su salida, el 15 de septiembre. Lo sacó un grupo de militares, el alcaide de la prisión se asustó ante la magnitud del operativo y envió a un gendarme a vigilar el traslado del detenido al Ministerio de Defensa, la noche del 15 septiembre.
A la familia, los militares le dicen ahora que Domingo Blanco fue lanzado al mar el día 13, contradiciendo lo que consta en un documento oficial.
- La dirección del Partido Comunista de mayo de 1976, que fue detenida en la calle Conferencia. Eran cinco personas: Mario Zamorano, Jorge Muñoz, Uldarico Donaire, Jaime Donato y Elisa Escobar. La información de los militares señala que Donaire y Donato, miembros de la comisión política del PC, fueron lanzados al mar el mismo día de la detención, el 5 de mayo, y a los otros tres se les dan fechas distintas. ''Es decir, hacen un esfuerzo gigantesco para capturar a la dirección del PC y la lanzan al mar el mismo día'.
Para Carmen Hertz, la escueta frase arrojado al mar, al río o al lago 'x', que figura en la ficha de cada detenido desaparecido, no tiene ningún efecto procesal. 'No es prueba de nada, aunque ellos hayan querido instalar la idea de que ya dieron el destino final y que hay que terminar con esto, y que ahora es necesario legislar'.
Otro dato no menor, en opinión de la abogada, es que casi todas las personas de las cuales han entregado información corresponden a las causas que está investigando el juez Guzmán: caravana de la muerte, Pisagua y Calle Conferencia. Son causas por las que están procesados un buen número de militares.
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