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La UE frena la extensión de la prueba de las 'vacas locas' a todas las reses adultas

España deberá justificar ante la Comisión los motivos del cierre de fronteras al ganado francés

Gabriela Cañas

Los ministros de Agricultura de la UE han decidido aplazar la extensión de la prueba de las vacas locas a todas las reses, sanas o sospechosas, mayores de 30 meses. Esta medida, que debería haberse implantado en julio próximo, hubiese supuesto someter a test entre siete y ocho millones de reses al año. Los ministros, sin embargo, acordaron supeditar la medida a los resultados de una serie de controles previos que se iniciarán el 1 de enero próximo. En este difícil acercamiento a una postura común sobre esta crisis, los ministros dejaron muchas de las cuestiones abiertas en manos de los expertos.

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Una cuestión que ha quedado en el alero es la de emitir una opinión sobre el veto decretado por Francia de prohibir todos los piensos cárnicos. Los ministros de Agricultura, tras un debate que duró 16 horas, decidieron encargar un informe a la Comisión Europea sobre "las consecuencias sanitarias de utilizar o no harinas animales en la UE para los herbívoros y las otras especies, además de un examen sobre las consecuencias económicas y medioambientales".A este respecto, Nicole Fontaine, presidenta del Parlamento Europeo, lamentó que los ministros de Agricultura no hayan respondido positivamente a la petición hecha por la Eurocámara de prohibir estas harinas "mientras los Estados miembros no puedan garantizar la aplicación de las legislaciones europeas existentes", como expresó el pleno del pasado 16 de noviembre.

Este asunto está también pendiente de decisión. En principio, Francia pretendía adoptar un acuerdo mediante el cual España, Italia, Holanda y Austria tuvieran que levantar su embargo al vacuno francés. Este punto fue el que atascó una negociación que duró 16 largas horas.

"Nosotros decretamos el embargo sobre argumentos científicos, de manera que no podíamos aceptar un acuerdo meramente político", explicó ayer el ministro de Agricultura español, Miguel Arias Cañete.

Finalmente, los ministros se comprometieron a notificar a la Comisión Europea "en 24 horas" las razones de las medidas tomadas y será la Comisión, sobre los argumentos del Comité Científico Director, la que se pronunciará antes del 30 de noviembre próximo si tales medidas deben levantarse o, por el contrario, "ir hacia un reforzamiento comunitario".

Los responsables de Agricultura sí lograron acordar ayer extender las pruebas al vacuno en riesgo sacrificado "de más de 30 meses" a partir del 1 de enero próximo. Se consideran animales en riesgo aquellos que provienen de granjas que han sufrido casos de EEB (encefalopatía espongiforme bovina o mal de las vacas locas), que tienen antecedentes o que muestran algún síntoma. Esta medida implica multiplicar por tres la norma comunitaria, que preveía pruebas aleatorias a animales en riesgo. Ahora se hará a todas, pasando de 170.000 anuales a unas 400.000.

La decisión sobre la prueba masiva a animales sospechosos y sanos, que comporta una casi total garantía para el consumidor, no quedó tan clara. El acuerdo dice así: "A la luz de la experiencia adquirida , se tomará una nueva decisión sobre la manera en la que se pondrá en marcha a partir del 1 de julio de 2001 para los bovinos de más de 30 meses que entran en la cadena alimentaria".

La Comisión Europea estima que en toda Europa se sacrifican entre siete y ocho millones de reses de vacuno de más de dos años y medio. El ministro español de Agricultura, que compareció ante a la prensa al final de la interminable reunión, a las ocho de la mañana de ayer, aseguró que sobre este punto varios países (los escandinavos más Austria y Holanda) estuvieron a punto de lograr una minoría de bloqueo. "Piensan que es difícil aplicar una medida tan drástica".

Otra medida tomada ayer y sobre la que hubo acuerdo desde el primer momento es la de retirar definitivamente de la cadena alimenticia los cadáveres de animales, es decir los muertos por otras causas no debidas al sacrificio programado.

En todo caso, la decisión última está ahora en manos del Comité Científico Director y del Comité Veterinario. Sus expertos deben pronunciarse hoy mismo sobre la extensión de las pruebas. Los ministros del ramo volverán a reunirse, a más tardar el 4 de diciembre, para concretar más detalles sobre la forma de controlar esta nueva crisis cernida sobre Europa.

Por su parte, el Gobierno griego anunció ayer la prohibición temporal en su país de alimentar a las reses con harinas animales.

Sobre la firma

Gabriela Cañas
Llegó a EL PAIS en 1981 y ha sido jefa de Madrid y Sociedad y corresponsal en Bruselas y París. Ha presidido la Agencia EFE entre 2020 y 2023. El periodismo y la igualdad son sus prioridades.

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