La Generalitat privatizó el buscador Olé sin el permiso de la fundación que lo creó
La Generalitat de Cataluña privatizó el buscador Olé en 1996 sin la autorización preceptiva del patronato de la Fundació Catalana per a la Recerca, la entidad que lo creó. Los beneficiarios, ya sin relación con la Generalitat, vendieron Olé a Telefónica en 1999 por 3.000 millones de pesetas y derechos sobre acciones de Terra cuyo valor actual es de 24.000 millones de pesetas. Martín Velasco, ex directivo de Telefónica, fue uno de los grandes beneficiarios.
Varios grupos parlamentarios llevan meses tratando de dilucidar las causas que llevaron al Gobierno de Jordi Pujol a privatizar sigilosamente Olé, el buscador creado con fondos públicos que dio origen a Terra. El diputado del PP Daniel Sirera ha pedido examinar "el expediente de venta de Olé" y el martes recibió respuesta por escrito del consejero de Investigación, Andreu Mas-Colell: "El Gobierno no dispone de ningún expediente de venta de Olé".La privatización de Olé no recibió nunca el visto bueno del patronato de la FCR, al que le corresponde "la representación, dirección y administración" de la FCR. En las actas de las reuniones del patronato, a las que ha tenido acceso este diario, no hay constancia de que la máxima instancia de la Fundació autorizara el paso a manos privadas de un buscador que Telefónica compró posteriormente por 3.000 millones de pesetas.
La FCR es una entidad que se nutre fundamentalmente de fondos de la Generalitat. Entre 1991 y 1997, el Gobierno de Pujol aportó a esta institución 5.500 millones de pesetas. Además, cuatro departamentos de la Generalitat forman parte de su patronato, junto con varias empresas. Cuando se privatizó Olé, el presidente de la Fundació era Macià Alavedra, entonces consejero del Gobierno de Pujol.
En 1995, la FCR puso en marcha Cinet, un departamento para todo lo relacionado con Internet. Olé, el primer buscador de Internet en castellano, nació en este departamento en 1995 y el servicio se lanzó en enero de 1996. En aquella época, la FCR lo presentó como algo propio: el programa fue diseñado por sus técnicos, se albergó en sus ordenadores y la fundación pagaba el salario de todos los integrantes de Cinet y Olé. No obstante, el paso de Olé por la FCR ni siquiera consta en la memoria de 1996, elaborada por el entonces director, Josep Antoni Plana Castellví, militante de Unió Democràtica (UDC).
Según las actas, el patronato de la FCR autorizó el 11 de julio de 1996 la conversión de Cinet en Xarxa Cinet, una empresa vinculada a la FCR, algo que Plana Castellví ya había realizado en abril. Pero en las actas no hay alusiones a Olé, hasta entonces integrado en Cinet.
El actual presidente de la FCR, Rafael Español -un empresario de la máxima confianza de Pujol- restó ayer importancia a que la privatización de Olé no fuera autorizada por el patronato, una opinión compartida por Plana Castellví. Éste, sin embargo, admite que cometió un "error" al no pedir la autorización, si bien afirma que fue inducido a desprenderse del buscador por decisión "estratégica política" ante las críticas recibidas porque el buscador utilizaba el castellano.
Justo el día después de la reunión del patronato de la FCR, el 12 de julio de 1996, se constituyó la empresa privada Ordenamiento de Links Especializados (OLE, S.L.), de la que la FCR ya no participa. Es un trabajador de Cinet, Josep Vallès, el que la constituye por su cuenta sin el permiso del patronato.
A partir de esta fecha, Xarxa Cinet y OLE ya no tienen relación. La primera será comprada por Retevisión en 1998, tras la autorización del patronato de la FCR, por 310 millones. En cambio, Telefónica adquirió OLE en abril de 1999 por 3.000 millones de pesetas y los beneficiaros obtuvieron opciones sobre futuras acciones de Terra que hoy tienen un valor de 24.000 millones de pesetas. La última venta de OLE se hizo a través de Infosearch, sociedad radicada en Luxemburgo, a la que se incorporó Martín Velasco, quien fue al mismo tiempo consejero de Telefónica y accionista de Infosearch, y que fue quien obtuvo más de un tercio de los beneficios.
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