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El 80% de la red pública dará inglés a los niños de 4 años este curso

Juegos y actividades

La experiencia de introducir en los colegios públicos el aprendizaje del inglés a partir de los cuatro años se generalizará el próximo curso. Educación prevé que al menos un 80% de los centros de infantil y primaria dispongan del profesorado y los medios necesarios para desarrollar el programa, que se puso en marcha de forma experimental en 1996 en 13 escuelas y que el curso pasado ya se había implantado en el 40% de la red pública. El éxito de la iniciativa y la presión social ejercida por los padres, que desean que sus hijos se familiaricen con la lengua inglesa lo antes posible, ha animado al Departamento a redoblar su apuesta por la introducción temprana del inglés, aunque la ley no obliga a enseñar el segundo idioma -tercero en el caso del País Vasco, por ser de una comunidad bilingüe- hasta los ocho años. El plan ha requerido que se destinen más docentes especialistas en inglés y se refuerce el equipo de asesores que se encarga de elaborar el material didáctico.

De este modo, durante el curso 2000-2001 serán más de 240 los colegios que impartirán inglés a los más pequeños, el doble que las que estaban inscritas en este programa de intensificación de la enseñanza de la lengua inglesa. Según las previsiones de Educación, podrá llegar a los 310 centros de la red pública en el curso 2001-2002.

Los niños de cuatro y cinco años recibirán tres clases de media hora de inglés a la semana

Rosa Aliaga, la coordinadora del grupo de asesores que prepara a los profesores, explica que los docentes tienen que realizar en clase con los pequeños los mismos juegos y actividades -cuentos y canciones, sobre todo- que realiza la tutora en castellano o en euskera, pero en inglés. "Se ha preparado una metodología abierta para que cada profesor en su aula y en contacto con el tutor de cada grupo pueda adaptar lo que proponemos a la realidad que tiene en su clase", resalta Aliaga.Una vez que los pequeños cumplan los ocho años entrarán en la segunda fase del aprendizaje del inglés. A diferencia de las tres horas semanales que exige la Ley de Ordenación General del Sistema Educativo (LOGSE) para esta etapa de la enseñanza, Educación tiene previsto introducir cambios y ampliar hasta cinco horas de clase el contacto semanal de los alumnos con la lengua ingles en el próximo curso.

Para ello ha montado otro equipo de asesores que se va a encargar de elaborar materiales didácticos destinados a los profesores que enseñan en esta etapa. Según la experta, no es la edad la que determina si los alumnos van a aprender más o no, sino el tipo de método que se emplea y la continuidad que se le da.

"Es vital que lo que se ha desarrollado entre los cuatro y los ocho años tenga una continuidad, tanto metodológica como de formación del profesorado, hasta que los pequeños lleguen a los 12 años. Si empiezan a aprender inglés a los cuatro años pero en tercero de primaria [a los ocho años] se pierde todo lo logrado porque no se sigue potenciando el inglés, el trabajo anterior no sirve para nada", advierte Aliaga.

La concepción anterior de aprender un idioma consistía en asimilar bien la gramática y el vocabulario pero, según la especialista, así no se deben estudiar las lenguas. "Se aprende utilizándolas como instrumento para comprender otra cosa", dice. Y esa será la base de la metodología que se va a utilizar de los ocho a los doce años en las escuelas públicas del País Vasco.

El objetivo consistirá en aprender contenidos de matemáticas, de ciencias sociales o de la naturaleza en inglés. "El contenido de lo que se trabaje en la lengua inglesa tendrá algo que ver con el currículo de otras asignaturas", explica Aliaga. La primera unidad didáctica para los profesores ya está diseñada: el tema es el tiempo. Los alumnos tendrán que medir un minuto, ver lo que son capaces de hacer en sesenta segundos, comprobar cómo han sido los relojes a través de la historia, resalta Aliaga.

No se podrá hacer, de momento, más que en los 40 colegios seleccionados para ensayar de forma experimental el nuevo sistema diseñado para niños a partir de los ocho años.

Ninguna comunidad española ha implantado de una manera tan generalizada la introducción temprana del inglés. Rosa Aliaga achaca este hecho a que, al ser Euskadi una comunidad bilingüe, aprender una tercera lengua se plantea como un reto a cubrir, mientras que las comunidades monolingües tienen más prejuicios con la segunda lengua.

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