Argentina insta a Aznar a negociar una solución a la crisis de Aerolíneas

El Gobierno argentino ha instado al español a buscar una solución a la crisis en Aerolíneas Argentinas que tenga en cuenta, sobre todo, que Iberia, cuando Aerolíneas fue privatizada, recibió una empresa sin deudas y con flota propia y ahora tiene 800 millones de dólares de deuda. Rodolfo Terragno, jefe del Gabinete argentino, comunicó ayer a Aznar que Endesa tendrá que desinvertir en una de las dos eléctricas que controla en Argentina en favor de la competencia.

Las empresas españolas en Argentina fueron el principal asunto que trataron el miércoles en La Moncloa Rodolfo Terragno, jefe del Gabinete del Gobierno argentino, y José María Aznar, presidente del Gobierno español. España es el principal inversor extranjero en Argentina, país al que ha destinado inversiones por valor de 34.000 millones de dólares (cerca de seis billones de pesetas). Telefónica, Endesa, o la SEPI (Sociedad de Participaciones Industriales) han entrado de lleno en los sectores privatizados en la última década, y la crisis en alguno de ellos ha despertado un sentimiento anti-español. Aerolíneas es el caso más claro. Terragno mantiene que "Aerolíneas ha estado mal manejada tras la privatización. Eso lo reconoce hasta la SEPI", propietaria del 80% del capital de Aerolíneas. El jefe del Gabinete argentino (número tres en el Gobierno de Fernando de la Rúa) transmitió ayer a Aznar que su Gobierno, pese a las restricciones presupuestarias del plan de ajuste, está dispuesto a colaborar para reflotar la compañía, pero que su participación en el capital es del 5% y sin acción de oro. Aznar le recordó que ya ha invertido 1.300 millones de dólares (unos 230.000 millones de pesetas) en Aerolíneas y que no quiere "dejarlos hundidos". Fuentes de Moncloa añadieron que "la SEPI quiere evitar la quiebra de Aerolíneas".

Aznar y Terragno también analizaron la situación de Telefónica, Endesa y Repsol en Argentina. La Secretaría de Defensa de la Competencia ha transmitido a Endesa que debe vender su participación en una de las dos eléctricas argentinas, que debe optar o por Edenor o por Edesur. Endesa no ha puesto ningún inconveniente en realizar esa desinversión, aunque sin fijarse plazos. Tampoco la Secretaría de Defensa de la Competencia argentina ha puesto un plazo para optar por una de las dos. En principio, parece posible la venta a EDF (Éléctricité de France) de la participación de Endesa en Edenor.

Telefónica, por su parte, afronta en noviembre la desregulación de las telecomunicaciones. Hasta ahora, ha compartido con Telecom (de capital franco-italiano) el monopolio. Telefónica se ha quejado de que la desregulación no tiene en cuenta la fuerte inversión realizada en modernizar la red, pero se enfrenta a los poderosos grupos de presión estadounidenses, que abogan por la entrada de las grandes compañías del norte en el país.

[Los sindicatos de Aerolíneas presentaron ayer al Gobierno argentino un plan para sanear la empresa, que propone una mayor utilización de la flota. El Plan Restaurar ha sido realizado por el estadounidense Randolph Babbit, responsable de la reestructuración de United Airlines. "Si la flota de Aerolíneas fuese utilizada adecuadamente se crearía el equivalente a tener 19 aviones más operando. Costaría muy poco y supondría ingresos adicionales de 400 millones de dólares al año", señaló Babbit].