La Universidad de Valencia abre en Cuba un centro óptico, su proyecto de cooperación más ambicioso

La Universidad de Valencia inaugura la próxima semana en La Habana el Complejo Óptico Valencia, punta de lanza del "proyecto de cooperación más importante desarrollado por esta universidad", según su coordinador, el profesor de Óptica Juan Onrubia.El proyecto sienta las bases para solucionar un problema acuciante: en las provincias Ciudad de la Habana y La Habana, más de un millón de personas necesitan llevar gafas, lo que requiere de un tallado de dos millones largos de lentes. La capacidad del único taller de tallado en activo no sobrepasa las 100.000 lentes anuales, "suponiendo que pudiesen seguir funcionando sus actuales instalaciones, cosa difícil". Muchos cubanos pueden tardar 15 años en renovar sus gafas.

"La capacidad de tallado del nuevo complejo óptico", subraya Onrubia, "será de 230.000 lentes anuales". Este centro de carácter integral está dotado con dos talleres, de tallado y de adaptación de lentes, óptica, gabinete optométrico y consulta oftalmológica.

El proyecto abarca, además del Complejo Valencia, dos servicios básicos de oftamología en hospitales y una amplia labor asistencial y formativa optométrica y de intervenciones quirúrgicas. Su cuantificación global es de 220 millones de pesetas, según precios de mercado del material y maquinaria óptica, montante alcanzado gracias a la implicación de la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI), el Fondo Solidario Fortuna, la Fundación ONCE, la Generalitat Valenciana y la Diputación de Valencia. "El apoyo de instituciones tan dispares", destaca Onrubia, " ha hecho que la AECI ponga el proyecto como modelo de cooperación".