La ministra de Tecnología prevé tarifa plana de todos los operadores para enero

Telefónica y el Ministerio de Ciencia y Tecnología cruzan mensajes dispares respecto a las efectos que la implantación de la tarifa plana para Internet tendría en la red de telefonía. Mientras la operadora advierte del peligro de colapso de su red y de caída en la calidad del servicio, la ministra de Ciencia y Tecnología, Anna Birulés, sostiene que la red de Telefónica "funcionará perfectamente" y augura que la tarifa plana completa (las 24 horas del día) se implantará hacia enero próximo, cuando Telefónica pierda el monopolio de las llamadas metropolitanas.

El próximo Consejo de Ministros tiene previsto aprobar un plan para aplicar la tarifa plana en Internet que, en principio, tendrá horario limitado: entre las seis de la tarde y las ocho de la mañana y los fines de semana completos. La ministra de Ciencia y Tecnología justificó ayer en varias declaraciones la conveniencia de esta limitación.Por un lado, Birulés argumentó que la red de voz tiene "picos de tráfico" muy altos entre las diez y las doce de la mañana. Este factor repercutiría en la calidad del servicio si los usuarios domésticos se lanzaran en bloque a Internet animados por la tarifa plana (en torno a las 3.000 pesetas al mes). "Hemos de hacer un proceso que permita un funcionamiento perfecto para todos en cualquier momento del día", dijo en Radio Nacional.

Telefónica admite las ventajas de una tarifa plana, pero advierte que hay que aplicarla con cuidado para evitar errores y para que no ocurra como en Austria, donde se retiró al poco tiempo de su entrada en funcionamiento.

"Es lógico que en estos momentos Telefónica se intente defender, pero este proceso de liberalización estaba claramente anunciado, regulado y previsto desde hace años", insistió la ministra, quien dio por sentado que Telefónica tiene previstas las medidas adelantadas por el Gobierno, entre las que figuran la tarifa plana. "Funcionaría perfectamente", aseguró.

A juicio de Enrique Gutiérrez Bueno, decano del Colegio de Ingenieros de Telecomunicación, "el problema, más que tecnológico, es de costes. En el momento actual, la red de conmutación telefónica no soportaría las consecuencias de la tarifa plana, pues las centrales y las líneas se saturarían y la calidad del servicio sería ínfima. Para garantizar al usuario no sólo un precio asequible, sino también calidad, habría que realizar fuertes inversiones en la red básica que, con el precio adelantado por la ministra, no parecen justificarse".

16 millones de líneas

La responsable de Ciencia y Tecnología afirmó ayer que la red estará disponible para enero de 2001, en que todos los operadores accederán a las llamadas locales a través de la red de telefonía básica. La titular de Ciencia y Tecnología recordó que la apertura del bucle local a la competencia permitirá a todas las empresas competir por "los 16 millones de españoles que ya tienen conexión local".

Los principales operadores se mostraron cautos y a la espera de las medidas que el Gobierno dicte para se garantice el acceso en condiciones de igualdad a la hora de ofrecer todos ellos tarifa plana. Retevisión y Uni2 coincidieron en señalar que el peaje que ahora pagan al operador dominante hace imposible al resto de los operadores ofrecer un servicio a precio competitivo. Pese a todo, ONO ha lanzado una oferta de tarifa plana al precio de 2.500 pesetas al mes.

La Asociación de Internautas (AI), que ha sido muy beligerante a la hora de reclamar tarifa plana las 24 horas del día, interpreta la oferta del Gobierno como "una conquista" para presentar ante la próxima cumbre europea. El presidente de la AI, Víctor Domingo, admitió que la ministra "ha conseguido arañar alguna mejora" pero rechazó las quejas de Telefónica en el sentido de que la implantación de una tarifa plana provocaría una congestión en la red: "Tenemos una televisión las 24 horas del día disponible por el mismo precio y no hay mucha gente que la esté viendo día y noche".