Tommy Lee busca con su nueva banda ampliar su público más allá del rock

Tommy Lee, ex batería del grupo heavy Mötley Crüe, quiere dejar atrás un pasado turbulento, del que se recuerda más su paso por la cárcel que sus discos, para llegar con su música a "un público más amplio que el del rock". Con Methods of Mayhem, Lee asume el reto de cantar, tocar la guitarra y los teclados. Tommy Lee y los componentes de su banda se encuentran en San Sebastián, pero los tres conciertos de su gira por España fueron suspendidos ayer. Los músicos atribuyeron la cancelación de San Sebastián a "problemas técnicos": las dos baterías que utilizan en directo no cabían en el escenario.

Lee no parece de cerca tan fiero como le pintan. El aura de chico violento que arrastra tras la condena a prisión por agredir a su esposa -la actriz Pamela Anderson, una de las vigilantes de la playa- se esfuma. Mientras mordisquea una tortilla de patatas y ofrece zumo de frutas, reconoce que es feliz en la nueva etapa que se abrió con Methods of Mayhem, un proyecto surgido de la colaboración con TiLo (Tim Murray), una celebridad entre los aficionados al rap. Después de 20 años tocando la batería, y de haber conocido el éxito con Mötley Crüe, Lee quería asumir un reto diferente. Como tocar la guitarra y cantar al mismo tiempo, algo que le tuvo aterrorizado en las primeras actuaciones, acercarse a los teclados, sin abandonar su querida batería. Con la nueva banda quiere captar una audiencia más amplia que la del rock. "Blancos, negros, amarillos, gente muy metal, padres, niños, parecen tan felices en los conciertos. Con la música se puede reunir gente que nunca lo haría", afirma.

En la primera grabación de Methods of Mayhem suena el rap, hip hop, funk, punk rock y música techno, fruto de los gustos de Lee y del tiempo que tuvo para reflexionar, los cuatro meses que paso en la cárcel. "Quiero hacer algo nuevo, que me haga sentir bien", explica. "Todas las canciones hablan de la realidad, no hay fantasía. He estado en una bola de mierda y en los dos últimos años he madurado. En la cárcel fui muy infeliz y me preguntaba por la espiritualidad, por las relaciones, por qué, por qué, por qué. Yo mismo encontré las respuestas".