Periodistas colombianos promueven una declaración contra los atentados a la libertad de prensa

Un grupo de periodistas colombianos anunció ayer que promoverá una declaración contra los atentados que de manera reiterada se vienen cometiendo en Colombia contra la libertad de prensa y el derecho de los ciudadanos a estar libremente informados.La iniciativa, patrocinada por la Fundación para la Libertad de Prensa, se produce tras la emboscada y el atentado de que fue objeto la periodista Jineth Bedoya Lima, del matutino El Espectador, por parte de un grupo paramilitar. Fue citada para una entrevista el jueves de la semana pasada con miembros de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) presos en La Modelo, de Bogotá, y cuando se dirigía a la prisión fue capturada por varios hombres armados. Finalmente fue encontrada, amordazada y sedada, cerca de la ciudad de Villavicencio, 80 kilómetros al sur de Bogotá.

El secretario de la organización internacional Reporteros sin Fronteras, Robert Ménard, se declaró ayer "escandalizado" por el secuestro y agresiones sufridas por la periodista de El Espectador, en una carta enviada al ministro del Interior, Humberto de la Calle. Bedoya salió ilesa de una primera agresión en junio pasado, por la que esa organización ya había interpelado al presidente de Colombia, Andrés Pastrana. Entonces se le pidió un programa de protección de los periodistas para garantizar la seguridad, pero "un año después, este programa todavía no existe".

130 asesinatos

Los comunicadores agrupados tras la Fundación para la Libertad de Prensa exigen al Gobierno que fije su posición respecto a la libertad de prensa, el derecho de la sociedad a estar informada y la protección a la labor que cumplen los periodistas. Igualmente solicitan que la Fiscalía del Estado divulgue las investigaciones realizadas por el asesinato de cerca de 130 periodistas en los últimos diez años.

Desde 1995, los periodistas en este país son considerados como "objetivos militares" por los grupos armados, tanto de extrema izquierda como de extrema derecha. Entre 1998 y 1999, un total de 29 informadores fueron secuestrados y al menos otros nueve tuvieron que exiliarse.