El Womad deja las calles de Cáceres por un descampado

La novena edición del Womad de Cáceres ha roto drásticamente con sus señas de identidad originales alejándose del escenario que le vio nacer y crecer: la ciudad medieval de Cáceres. En su lugar, un descampado de la Ciudad Ferial acoge este fin de semana a miles de personas que, bajo un tórrido sol, disfrutan con los ritmos de músicos de 22 países.

Las callejuelas y plazas del casco monumental de Cáceres se muestran este año a salvo de concentraciones masivas y sólo se ofrecen escasas actuaciones. En ese escenario, los checos de Vera Bila abrieron el fuego con su particular toque de gitanos centroeuropeos. Tres guitarras, una pandereta y unas voces fuertes y candenciosas resumieron ya de entrada la filosofía Womad en una magnífica comunión con el público. En el laberinto de calles proliferan numerosos puestos callejeros en una forzada toma de la ciudad para justificar que el Womad sigue allí, pero sólo está en espíritu.El festival se ha trasladado tres kilómetros más allá, en plena periferia. El centro de operaciones es un antiguo campo de aviación que rememora la imagen de Woodstock. Miles de personas han llegado en tren, turismos, furgonetas, motocicletas y bicicletas, muchos con la casa y la familia a cuestas, sobre todo alemanes.

Un enorme campamento de tiendas rodea el recinto donde se han instalado cuatro escenarios, que se proyectan sobre grandes explanadas que acogen mercadillos, restaurantes y barras que exhiben comida y bebida para satisfacer a un ejército numeroso. Pañuelos coloreados de grandes dimensiones se alzan sobre el tendido eléctrico tratando de dar un toque de color a la fría estética del lugar.

La gran sorpresa de este Womad es el escenario Cabaret, un género hasta ahora inédito en el festival. Los franceses Leandre y Claire son los grandes triunfadores, mezclando flamenco, ópera y punki en un ejercicio que recrea circo y humor. El escenario Culturas se reserva para los grupos autóctonos, y ahí destaca la presencia de Perroflauta, Los Niños de los Ojos Rojos y Acetre, una formación con más de 20 años de experiencia que ha alcanzado plena madurez y que Peter Gabriel parece dispuesto a incorporar a su elenco Womad. Una vieja conocida, la colombiana Toto La Momposina, Papá Noel y Chumbawamba entran en la terna de los preferidos del público.