Natural y atrevido

La viticultura ecológica es la corriente en boga en el mundo del vino. Un reto en cuanto a diversificación y calidad al que sólo unos pocos pueden acceder. La elaboración de vino orgánico no se puede realizar de la noche a la mañana, ya que los viñedos tienen que estar tres años sin ser tratados con productos químicos de síntesis para liberar los suelos de sustancias extrañas.Sin seguir a pies juntillas a puristas que afirman que la viticultura ecológica "nace de la explotación cósmica de la vid" y que la acción del hombre se reduce exclusivamente a su abono natural, algunos nuevos elaboradores apuestan por una selección de cepas y pagos, un natural y extremo cuidado de la vid, con recogida manual de los frutos. Ni que decir tiene que los herbicidas están prohibidos y que los terrenos colindantes no contaminan. La fermentación y la crianza también siguen técnicas y procedimientos no agresivos con los mostos.

Heredad Guzmán Aldazabal, es una bodega familiar de Navaridas que atesora el saber de cuatro generaciones. El joven Javier capitanea una nave con un férreo rumbo hacia el vino ecológico, en una clara apuesta por la diferenciación que no olvida el vestido de la botella, sin cápsula al estilo de los caldos del nuevo continente.

El crianza del 97 muestra un color rojo cereza de capa media, una nariz algo cerrada en la que se distinguen unos matices de fruta con un fondo muy leve de crianza. En boca su ataque es suave pero persistiendo más las notas de fruta sobre las de crianza. Recomendamos oxigenar el vino en una jarra de boca ancha.

Bodegas Heredad Guzman Aldazabal. Calle Marqués de Estella 17. Navarides (Álava). Teléfono: 941 10 50 24.