Michael Mann pronostica un siglo XXI más sangriento que el XX El nacionalismo centra la clausura en Valencia del congreso de historiadores

La limpieza étnica se ha incrementado con el desarrollo del Estado-nación moderno. Se calcula que ha originado entre 60 y 120 millones de muertos en el siglo XX. La situación más peligrosa se produce cuando varios grupos nacionales tienen posibilidades reales de crear un Estado, como en el caso de la antigua Yugoslavia. "Ha sido un mal siglo", concluyó ayer el historiador británico Michael Mann, de la Universidad de California, en la última jornada del congreso El siglo XX: balance y perspectivas, que se ha celebrado en Valencia.

"La tendencia indica que el siglo XXI también podría ser muy sangriento", añadió Michael Mann, que participó en la sesión dedicada a los nacionalismos junto a Miroslav Hroch, de la Universidad de Praga, y al español José Álvarez Junco, de la Universidad de Tufts. Mann señaló que esa violencia "etnopolítica" se ha incrementado en las últimas décadas y recordó que, salvo excepciones, a lo largo de la historia no ha habido un "deseo deliberado de eliminación absoluta del enemigo".

La introducción en las sociedades occidentales del sentido liberal de propiedad abrió las puertas a la concepción de la diversidad, según Michael Mann. En Europa occidental y del norte se desarrollan más conflictos de clase que de etnia al ser monoétnicos en un 70% y 80%.

El peligro surge cuando conviven dos grupos étnicos, que, por diferentes razones -la religión es determinante-, tienen posibilidades reales de crear su propio Estado, como es el caso de la antigua Yugoslavia. El historiador británico Michael Mann también advirtió del peligro de repartir a dos grupos monoétnicos en sendos Estados, como en Ruanda y Burundi.

La intervención de Miroslav Hroch llevaba por título Identidad regional, étnica y nacional en perspectiva histórica. Este historiador defiende la tesis de que los movimientos nacionales empiezan a gestarse ya en la Edad Media. Su análisis comparado sobre los hechos nacionales es un referente en la historiografía actual, aunque su obra no ha sido traducida al castellano.

Término equívoco

Miroslav Hroch dejó bien claro su rechazo al término nacionalismo por equívoco, debido a sus diferentes sentidos, desde la creación de un Estado, como en la acepción inglesa, hasta la identificación lingüística alemana, pasando por el significado peyorativo francés.

El historiador prefiere hablar de movimientos nacionales, de identidad nacional, que puede oponerse o no a la identidad regional. En su intervención, hizo hincapié también en la importancia de la memoria colectiva de la conciencia de un origen común en la construcción de un Estado-nación.

El historiador español José Álvarez Junco expuso someramente en la última jornada del congreso celebrado en Valencia Los problemas de la construcción nacional de España. Álvarez Junco recordó que la identidad nacional española se empezó a fraguar en el Siglo de Oro, siendo la xenofobia un elemento aglutinador fundamental.

También resaltó el historiador español la importancia de la guerra de la independencia frente a Francia de 1808 como generadora de conciencia nacional y puso especial énfasis en demostrar que las élites culturales españolas "sí hicieron su trabajo" en el proceso de construcción nacional a finales del siglo XIX, pero no así las "élites políticas".