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La empresa dice que "se pueden negociar" 800.000 pesetas más al año

Antonio Jiménez Barca

Los dirigentes del SEMAF, sindicato que agrupa a más de la mitad de los 5.800 maquinistas de España, piden mejoras laborales que no sólo pasan por el plano económico, según explican. Pero una de sus reivindicaciones principales consiste en subir las bonificaciones por nocturnidad o por desplazamientos.Un maquinista cobra al mes, de media, entre 170.000 y 250.000 pesetas, según el SEMAF. El sueldo base es, aproximadamente, de 110.000 pesetas. El resto del salario se complementa con este tipo de bonificaciones en un laberinto de conceptos que hace que un maquinista no cobre nunca lo mismo al mes. Renfe cifra en un aumento de 800.000 pesetas más al año las peticiones de los huelguistas. Y está dispuesta a negociar esta subida especial.

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Mariano Garrido, director general de relaciones laborales de Renfe, aseguró ayer que esta suma es "algo negociable, que se puede discutir, siempre y cuando los trabajadores acepten otra cosa". Esa otra cosa que deben aceptar los maquinistas es que no sea necesario que vayan dos personas para conducir un tren. La pareja de conductores se da en trenes de largo recorrido (más de 200 kilómetros). "Con los trenes que hay ahora, con un maquinista es suficiente, y si no, hay que fijarse en el AVE, que lo conduce sólo uno", añadió Garrido.

Los maquinistas también exigen una "homologación de la profesión". Juan Muñoz, uno de los trabajadores, resumió esta petición: "Es necesario que se establezcan unas reglas que digan quién es maquinista y con cuántos años de experiencia. Tenemos miedo de que, con las nuevas empresas privadas que se van a acabar imponiendo, surgan maquinistas nuevos no cualificados, nuestro trabajo desaparezca y también la seguridad del viajero", añadió.

"Como los pilotos"

Renfe no está de acuerdo: "Lo que quieren los maquinistas es funcionar como un gremio, como los pilotos de Iberia, para así decidir quién se hace maquinista y quién no para poder controlar el sector a su gusto. Y en eso no vamos a transigir. Es algo importantísimo para nosotros".

La mayoría de los maquinistas de Renfe se formó de la misma manera: cumplieron el servicio militar en un cuerpo especial ferroviario, ya extinguido, que duraba tres años. Tras cumplir con el Ejército, Renfe les contrató.

Los trabajadores también reclaman mejores lugares para pernoctar cuando tienen que desplazarse fuera de su lugar de residencia. "Hay dormitorios lamentables, donde tenemos que quedarnos toda una noche, con un servicio para toda la planta", comentaban ayer. Garrido conoce el problema: "Intentamos llevarles a hoteles, pero hay pueblos en los que no hay". La empresa ha citado a los trabajadores para otra reunión el lunes a las 11.30.

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Sobre la firma

Antonio Jiménez Barca
Es reportero de EL PAÍS y escritor. Fue corresponsal en París, Lisboa y São Paulo. También subdirector de Fin de semana. Ha escrito dos novelas, 'Deudas pendientes' (Premio Novela Negra de Gijón), y 'La botella del náufrago', y un libro de no ficción ('Así fue la dictadura'), firmado junto a su compañero y amigo Pablo Ordaz.

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