El Defensor del Pueblo investiga la asistencia sanitaria a niños sin cartilla

El defensor del Pueblo en funciones, Antonio Rovira, ha abierto una investigación sobre el acceso de los menores a la sanidad pública. Rovira ha dado este paso después de conocer que el hospital del Niño Jesús, de Madrid, se negó supuestamente a atender a un niño de tres años si su abuela no se comprometía antes por escrito a abonar el importe de la consulta. La abuela del pequeño vive de su pensión y la madre está en paro. El Insalud negó ayer veracidad a esta acusación y cuestionó la buena fe de la investigación. Los pocos datos que tiene el Insalud sobre el caso son los que relató la abuela en una carta al diario Abc el 11 de enero. Ésta asegura que el día 24, se supone que de diciembre, llevó a su nieto, que nació en Londres, al hospital porque tenía 39,5 de fiebre. "Se negaron a mirar al niño si no firmaba un recibo de 15.000 pesetas", asegura M. C. Ruiz en la carta, "pero no pienso pagarlo".

Para el Insalud esto es imposible. El gerente del centro, Jorge Gómez Zamora, aseguró ayer que "primero se atiende y luego se piden papeles". Sólo si el paciente no tiene tarjeta sanitaria, cartilla de la Seguridad Social o seguro privado, se le hace firmar un papel por el cual se compromete a presentar la documentación o pagar la consulta. El hospital intentó ayer sin éxito localizar al niño, del que no sabe su nombre.

Este caso ha encendido las alarmas en la oficina del Defensor del Pueblo, que investigará no sólo las circunstancias del mismo, sino el acceso de los niños a la red sanitaria pública. Y se produce casi un año después de que el Insalud enviara a todos sus centros una instrucción para dar a los niños inmigrantes un documento sanitario.

El mecanismo del Insalud para garantizar el derecho a la asistencia sanitaria tiene doble filo: asegura el control -por ejemplo, en el caso de que el accidentado tenga un seguro privado, permite reclamar el pago-, pero puede asustar a los que no tienen nada. "No se trata tanto de denegar la asistencia como del miedo que el trámite causa", subrayó Marciano Sánchez-Bayle, pediatra del Niño Jesús.