"Guerra fría" en la industria navarra de I+D

Un presunto caso de espionaje industrial de alta tecnología está a punto de abrir una batalla judicial entre dos de las empresas más destacadas en el área de la investigación y el desarrollo (I+D) de las que existen en la comunidad foral: M. Torres Diseños Industriales y Energía Hidroeléctrica de Navarra (EHN).Manuel Torres, propietario de la empresa que lleva su nombre, dedicada al diseño y la fabricación de maquinaria de alta tecnología para las industrias aeronáutica, papelera y eólica, compareció días atrás en calidad de testigo ante un juzgado de Aoiz, que investiga la querella judicial presentada por su compañía contra dos de sus ex ingenieros. La dirección de la empresa asegura que ambos fueron inducidos por Energía Hidroeléctrica de Navarra a abandonar M. Torres y llevarse consigo abundante información reservada (documentación, planos y material informático) para, tras crear una firma propia, seguir colaborando con EHN en la investigación del diseño de nuevos aerogeneradores eólicos.

EHN, empresa líder de España en la puesta en marcha de parques eólicos, nació en 1989 y es una firma semipública, ya que el 38% de sus acciones pertenecen al Gobierno foral a través de la Sociedad de Desarrollo de Navarra (Sodena), mientras que otro 10% más está en manos de Caja Navarra, controlada por el Ejecutivo de UPN. El resto se lo reparten Iberdrola (37%) y Cementos Portland (15%).

Como es obvio, EHN ha negado tajantemente las acusaciones de Manuel Torres, quien aseguró, tras prestar declaración judicial, que existen "indicios" en la causa de que EHN "indujo y financió" a los ingenieros Julián Baigorri y José María Aguirre a crear su propia empresa, Automation Izaga SA, en cuya sede la Policía encontró, en un registro judicial efectuado el pasado verano, más de cien kilos de documentos escritos, gráficos e informáticos que constituyen todo un archivo paralelo al principal capital de M. Torres: sus investigaciones industriales.

El empresario aseguró que entre la documentación intervenida a sus ex ingenieros se encuentran proyectos de máquinas eólicas y planos y estudios para una máquina fresadora utilizada en el proyecto del Avión de Combate Europeo- Eurofighter. Torres estima que la procedencia de todo ese material es ilícita.

Energía Hidroeléctrica de Navarra y M. Torres colaboraron entre el año pasado y parte del presente ejercicio en el desarrollo simultáneo de dos tipos de aerogeneradores eólicos. Sin embargo, el proyecto se paró debido a discrepancias sobre las prioridades de la investigación y la propiedad de las máquinas. Fue entonces cuando los dos ingenieros acusados dejaron M. Torres y crearon su propia empresa.

A continuación, ambos comenzaron a colaborar en el proyecto exclusivamente para EHN. Sin embargo, tras conocerse que M. Torres se había querellado contra ellos, EHN decidió anular su colaboración con Automation Izaga SA y los profesionales propios que habían investigado en equipos conjuntos con esa firma fueron trasladados a otra compañía del grupo, Energías Eólicas Europeas, encargada de promover parques eólicos en el continente.

Tal y como están las cosas, M. Torres analiza ahora la posibilidad de plantear una reclamación civil contra EHN por competencia desleal. El director de EHN, Esteban Morras, y un ingeniero de la empresa testificaron días atrás, también en calidad de testigos, ante la juez que investiga el caso.

EHN ha señalado que estudiará las acusaciones para interponer acciones legales contra lo que considera una "calumnia". La firma energética asegura que la investigación en la que participó Automation Izaga SA no contiene ningún secreto industrial y en ella colaboran asimismo empresas internacionales, como la danesa LM, la alemana Flender o la inglesa Garrad and Hassan, además de la también navarra Ingeteam.

La empresa energética prevé invertir el año próximo unos 70.000 millones de pesetas (420,7 millones de euros) en la promoción de nuevos parques eólicos en España y el resto de Europa. Hasta la fecha, EHN ha contribuido a crear en este sector unos 3.000 empleos, entre directos e inducidos.

M. Torres Diseños Industriales, fundada en 1975, piensa iniciar el próximo ejercicio la comercialización de aerogeneradores eólicos de tecnología propia construidos en fibra de carbono. Su cifra de negocio actual asciende a 6.000 millones y está centrada en el diseño de maquinaria para fabricantes de aviones. Entre sus clientes figuran firmas como CASA, British Aerospace, Boeing y otras. La incorporación de sus productos eólicos le llevará a doblar ventas en tres años, según sus cálculos.