"Somos diferentes"

La patente de un sucedáneo de la apetitosa angula, cuyo elevado precio no está al alcance del bolsillo de la mayoría de los españoles, ha desatado una ardua batalla legal. La empresa Angulas Aguinaga, ubicada en Irura (Guipúzcoa), que comercializa ese producto con la marca Gula del Norte demandó a la empresa ANDE (Angulas, Mariscos y Derivados) de Hernani por haber invadido la patente al fabricar una copia de ese producto bajo la marca Margula.El titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Bilbao ha condenado a la empresa ANDE a cesar de inmediato la fabricación del producto sucedáneo de angula con independencia de la marca o denominación de venta que pudiera identificarse dicho producto. Además, los propietarios deben entregar a la empresa demandante la maquinaria destinada a la fabricación de gulas para ser destruida.

Destruir existencias

En otra de las medidas adoptadas por el juzgado se insta a ANDE a destruir todas las existencias de Margula que pudiesen tener en los almacenes. E indemnizar a Angulas Aguinaga por los daños y perjuicios ocasionados.

La sentencia, que ha sido apelada por ANDE ante la Audiencia Provincial de Bilbao, declara nula la marca Margula, ya que se considera una copia de las marcas La Gula del Norte y Gulas, propiedad de la fábrica Angulas Aguinaga.

El kilo de angulas en la última campaña rondó las 70.000 pesetas y el de sus hermanas pobres se vende en los hipermercados a 695 pesetas el paquete de 200 gramos.

Por el momento el inventor de la gula, un sustitutivo de la angula natural de similares características organolépticas y sensoriales, va ganando en los juzgados a sus imitadores. Hasta que la empresa Angulas Aguinaga creó y comercializó la gula no se conocía en el mercado español un alimento de esas características y lo que se podía encontrar era un producto gelificado con sal al que se añadían diferentes ingredientes, pero que se alejaba bastante de la forma de la codiciada angula.

Los responsables de la empresa angulera consideran que la sentencia es "importante" porque defiende su derecho en exclusiva a fabricar el sustituto de angula, producto inventado y comercializado por ellos y que "nadie tiene derecho a imitar sin nuestra licencia". El alimento que comercializa esa empresa salió al mercado en 1991 y causó gran expectación entre los consumidores. Conseguida la mezcla de pescados para fabricar la gula lo más novedoso fue lograr una máquina que fabricara una copia de la angula, aunque sin ojos.

La gula que comercializa Angulas Aguinaga está compuesta por abadejo de Alaska mezclado con aceites vegetales, harina de trigo, clara de huevo, proteína de soja, extracto de almeja, tinta de sepia, gomas y ácidos. El producto que se obtiene para la elaboración de la gula se denomina surimi.

El sucedáneo de angula se cocinaba incialmente igual que la verdadera; cazuela de barro, aceite de oliva, ajos y guindillas. Sin embargo, el producto se puede encontrar ahora en ensaladas o pintxos.

ANDE no es la única empresa con la que Angulas Aguinaga tiene abierto un litigio. Sus representantes legales iniciarán en breve nuevos procedimientos judiciales en defensa de su patente contra aquellas empresas que producen sustitutos de angulas. A su juicio, los productos similares que hay en el mercado "son una mera mala copia" de la Gula del Norte " que está muy lejos de la que ofrecemos en nuestra empresa, inducen a error al mercado". De esta manera, lo que quieren es "garantizar la calidad".

Esta es la segunda sentencia que consigue a su favor Angulas Aguinaga, la anterior fue en el mes de mayo cuando el juez anuló las marcas Perlas de Aguinaga y Placeres de Aguinaga con las que venía operando la empresa Angulas Mayoz.