Los unionistas apoyan los pasos de Trimble, pero sólo hasta febrero
El líder de los protestantes irlandeses amenaza con dimitir si el IRA no se desarma
Los protestantes probritánicos dieron ayer un crucial espaldarazo al Partido Unionista del Ulster (UUP) de David Trimble aprobando su estrategia para formar un gobierno autónomo con sus antiguos antagonistas republicanos católicos y sentar así las bases para un desarme general. El consejo ejecutivo dio el mandato a Trimble por 480 votos a favor frente a 349 en contra en una asamblea que marcó un importante hito en la marcha hacia la paz.
Sin embargo, la asamblea decidió después de tres horas de agitado debate realizar una nueva consulta en febrero para verificar si el Ejército Republicano Irlandés (IRA) ha iniciado su campaña de desarme de conformidad al proceso de paz acordado en Stormont hace dos años. Pero la aprobación de la estrategia de Trimble implica que los partidos del Ulster podrían dar pasos definitivos para la formación de un gobierno autónomo cuyo gabinete incluiría a dos miembros del Sinn Fein, el frente político del IRA.Trimble se encargó de subrayar que el futuro depende de las decisiones que adopten los líderes del campo republicano cuando afirmó que renunciaría al liderazgo del Gobierno si el IRA no rinde sus arsenales a la comisión internacional de desarme presidida por el general canadiense John de Chastelain. En una referencia directa al jefe del Sinn Fein, Trimble declaró: "Nosotros hemos dado el salto. Ahora el turno es vuestro".
Trimble había amenazado con renunciar al puesto de ministro principal, en esencia, premier, del nuevo gobierno si en los próximos dos meses el IRA no entrega sus armas. "Hemos recibido un claro respaldo a las propuestas que trajimos al consejo del UUP", declaró triunfante Trimble, restando importancia al significativo número de opositores que vienen amenazando con precipitar una división del unionismo.
Londres y Dublín expresaron velozmente su satisfacción por la decisión adoptada ayer en Belfast. El primer ministro británico, Tony Blair, describió el resultado como "un nuevo respaldo al proceso de paz" y rindió homenaje a "Trimble y a los otros dirigentes políticos de Irlanda del Norte que continúan impulsando el proceso". "Estamos ahora en posición de avanzar hacia la devolución y al desarme para construir una paz duradera en Irlanda del Norte", dijo. En Dublín, su contraparte irlandesa, Bertie Ahern, dijo que la votación de ayer abre la vía para la paz en el Ulster después de tres décadas de violencia sectaria. "La historia juzgará la votación de hoy como un hito de enorme importancia en la marcha hacia un futuro más brillante para Irlanda del Norte y a toda la isla. Sé que la decisión del UUP ha sido difícil. Es fácil comprometerse a poner el pasado detrás, pero otra cosa es cumplir con ese propósito", declaró Ahern en una conferencia de prensa.
Inevitablemente, las voces de protesta en el campo protestante contrario a Trimble se multiplicaban anoche, a pesar del giro registrado en las últimas horas, cuando John Taylor, uno de los lugartenientes del jefe del UUP y que criticaba la postura del liderazgo, decidió votar a favor. Fue una decisión clave para los objetivos de Trimble. Pero descontento existe y éste es cada día más audible: Peter Weir, miembro de la bancada parlamentaria unionista, pronosticó horas antes de la votacion que "si triunfa el sí, la fractura del partido será inevitable". La poderosa Orden de Orange tambien se opone tenazmente al acuerdo, pero el principal riesgo que corre ahora Trimble proviene de la misma cúpula de su partido. Jeffrey Donaldson, uno de los más vitriólicos críticos del acuerdo de Stormont, insistió en que la única fórmula capaz de producir resultados pasa por el previo desarme total del IRA. "Todavía no hemos obtenido una promesa de que el IRA va a renunciar a la violencia y eso es precisamente lo que necesitamos en estos momentos", dijo.
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