Los países ricos hacen fracasar la cumbre mundial sobre la desertización

Río de Janeiro - 27 nov 1999 - 00:00CET

La Conferencia Mundial sobre la Desertificación que acaba de celebrarse en Recife (Brasil) y en la que han participado 3.000 delegados de 135 países, ha concluido en un rotundo fracaso, al negarse los países ricos a ratificar las conclusiones, que otorgaban mayores medios y poderes al organismo creado por la ONU para este propósito tras la Conferencia de Río de 1992 sobre Desarrollo y Medio Ambiente.La desertificación convierte cada año en incultivables 10 millones de hectáreas, según la ONU. Los países ricos han alegado que los más damnificados por la desertificación son los países del Tercer Mundo, y que a ellos tocaría emplear mayores recursos para esa lucha.

En los debates quedó muy claro, sin embargo, que la desertificación es un fenómeno que empieza a afectar también a los países ricos, incluidos los europeos, y sobre todo a Grecia, España y Portugal. Según la ONU, la desertificación de la tierra constituye hoy la "mayor amenaza del planeta" y está afectando ya a 260 millones de personas.

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