Un vacío legal amenaza la celebración de la Feria del Toro

A poco más de una semana para la inauguración de Ibertoro, la II Feria del Toro Bravo en Madrid, el espectáculo que anima todo el programa carece de autorización por parte de la Comunidad de Madrid. Es decir, a fecha de hoy, no se puede llevar a cabo la tienta de vacas. Ahora, la Dirección General de Turismo, de la que dependen los espectáculos taurinos, reclama documentación complementaria.

De esta forma, la Comunidad de Madrid se desdice de una decisión anterior por la que se exigía el sacrificio de las reses después del espectáculo. Un sacrificio que venía a significar la prohibición efectiva de su desarrollo, puesto que la finalidad de la tienta es la contraria: seleccionar para la reproducción la mejor vaca. "Esto es como si en una feria de ganado productivo se decidiera sacrificar a la vaca que más leche da", afirma Eduardo Martín Peñato, portavoz de la organización de Ibertoro.La Comunidad de Madrid ha decidido así dar marcha atrás en una resolución que, poco más o menos, acababa con la segunda edición de Ibertoro. La Dirección General de Turismo había recurrido a lo único que tenía a mano: el reglamento de festejos populares. Según éste, todos los espectáculos que supongan suelta de reses deben ser clausurados con el necesario sacrificio del astado. Cierto es que el reglamento en cuestión no contempla la tienta de vacas.

"Nuestra idea al proponer un espectáculo de estas características es dar a conocer la parte de la fiesta menos conocida. Tal y como lo hemos pensado, se trata de que los ganaderos participen en un concurso donde se puedan ver a sus mejores ejemplares. Por descontado que si luego se sacrifica a los animales, ¡a los mejores!, ninguno vendrá y, en consecuencia, habrá que suspender no sólo esta exhibición, sino Ibertoro en su conjunto", afirma el presidente de la Asociación de Ganaderos de Lidia, Martín Peñato, miembro de la organización de la feria.

Para el director general de Turismo, Joaquín Peñarrubia, toda esta polémica viene de una simple confusión. "Desde la Comunidad nos hemos limitado a hacer recordar el reglamento vigente. La obligatoriedad de sacrificar a los animales hace únicamente mención a la suelta de reses; es decir, a las exhibiciones de recortadores . Sobre la tienta de hembras estamos a la espera de que nos remitan la información complementaria para valorar si se autoriza o no", comenta Peñarrubia.

La contestación a las palabras del director general llega desde la sede de la organización de Ibertoro. El lunes pasado, un fax firmado por el jefe del servicio de espectáculos y actividades recreativas, Pedro Plans, hacía referencia al espectáculo de la discordia de forma explícita. La intención del escrito no era otra que la de denegar el permiso. Tras admitir que los únicos espectáculos que contempla el reglamento son el encierro y la suelta de reses, puntualiza que, en ambos casos, las reses se sacrificarán "en un plazo improrrogable de 24 horas a la terminación del espectáculo". Martín Peñato califica todo de absurdo: "Todo el problema viene porque no existe una reglamentación expresa que se ocupe de las tientas en público. Es decir, se trata de una carencia administrativa que, como es lógico, no puede obrar en contra de los administrados".