Puigneró anuncia el despido de entre 300 y 500 empleados
La dirección de Hilados y Tejidos Puigneró, SA, ha comunicado esta semana al comité de empresa que tiene la intención de despedir entre 300 y 500 de los trabajadores de sus centros de Sant Bartomeu del Grau, Roda de Ter y Prats de Lluçanès, todos ellos en la comarca de Osona. Estos despidos llegan después de que la empresa haya decidido desmantelar su línea de telares destinados a la producción de tejidos de baja calidad y precios bajos.
Este cierre parcial se debe a las pérdidas que la empresa acumula desde hace tiempo por la incursión en los mercados europeos de tejido asiático de baja calidad y a precios más baratos. Los problemas económicos de la empresa se agravan aún más por la complicada situación legal de su propietario, Josep Puigneró, condenado a ocho años de prisión por delito ecológico.La dirección de Puigneró no ha querido confirmar la cifra exacta de puestos de trabajo que quiere eliminar, aunque ha dado por seguro el cierre de parte de sus instalaciones. El director financiero, Domènec Pérez, ha asegurado que, sea cual sea el número de despidos, "se hará todo con la máxima transparencia". Asimismo, ha querido lanzar un mensaje de calma anunciando: "Los despidos se harán de la forma menos traumática posible y, siempre que se pueda, mediante jubilaciones anticipadas".
Productos no rentables
Domènec Pérez ha explicado que la decisión de cerrar parte de las instalaciones se debe a la política que sigue la dirección de "dejar de producir los productos que no resultan rentables" y ha defendido esta política explicando que "en otras ocasiones se ha tildado a esta empresa de obsoleta. Lo que hacemos ahora es adecuarla al siglo XXI".
Los sindicatos representados en el comité de empresa de los tres centros que Puigneró tiene en Osona están estudiando estos días el expediente de regulación de empleo presentado por la dirección. El secretario general de Comisiones Obreras en Osona, Climent Pujol, confirmó ayer que el comité de empresa está negociando estos días los detalles del recorte de plantilla. Pujol confirmó que la empresa les ha comunicado su intención de eliminar "entre 300 y 500 puestos de trabajo". A pesar de esto, Pujol aseguró que la dirección de la empresa no les ha informado de que piense cerrar ninguna de las tres fábricas de que dispone.
En el pasado mes de febrero, la empresa Puigneró ya aplicó un recorte de plantilla que supuso el despido de 133 personas. Esta cifra se sumaba a los 150 puestos de trabajo que se eliminaron hace un año. Todos los trabajadores que abandonaron la empresa después de estas regulaciones de empleo tenían contratos temporales y trabajaban en los telares de tejidos de baja calidad. Ahora, la producción asiática se ha adueñado más del mercado europeo y Puigneró no ha podido mantener funcionando los telares de este tipo que aún estaban en marcha.PASA A LA PÁGINA 11
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