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Puigneró debe 8.000 millones a Hacienda y a la Seguridad Social

Miquel Noguer

VIENE DE LA PÁGINA 1 Puigneró fue el primer empresario español que ingresó en un centro penitenciario por ser condenado por un delito ecológico. Después de una primera condena de cuatro años de prisión impuesta por la Audiencia de Barcelona y ratificada por el Tribunal Supremo en 1997, el pasado mes de abril, el Juzgado Penal de Manresa le condenó a otros cuatro años de prisión. Ambas condenas responden a un delito muy similar: contaminar con vertidos tóxicos dos cursos fluviales cercanos a su factoría de Sant Bartomeu del Grau con residuos procedentes de sus plantas de producción.

Actualmente, Josep Puigneró se encuentra fuera de la cárcel y a la espera de que la Audiencia de Barcelona se pronuncie sobre la condena de cuatro años de prisión impuesta por el Tribunal Penal de Manresa. Además, tiene pendientes dos nuevas causas penales por otros tantos delitos contra el medio ambiente que se habrían llevado a cabo, por vertidos a los mismos ríos, durante los tres últimos años.

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El año pasado facturó 22.000 millones de pesetas. Un informe del año 1997 aseguraba que la empresa contribuía en casi un 11% al valor industrial bruto de la comarca de Osona. Estas cifras contrastan con las elevadas deudas que la compañía tiene con Hacienda, cifradas el año pasado en más de 2.000 millones. A esta cifra hay que sumar los 6.000 millones de pesetas que debe a la Seguridad Social.

A lo largo de la semana próxima, los sindicatos acabarán de estudiar la propuesta presentada por la dirección de Puigneró y empezarán a negociar los detalles de la propuesta de regulación de empleo. Desde Comisiones Obreras ya se ha avanzado que, ante todo, se intentará llegar a un acuerdo que sea "favorable para ambas partes".

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La crisis de Puigneró puede tener graves repercusiones sobre las poblaciones afectadas, ya que dan empleo a buena parte de su población ocupada.

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Sobre la firma

Miquel Noguer
Es director de la edición Cataluña de EL PAÍS, donde ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional. Licenciado en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona, ha trabajado en la redacción de Barcelona en Sociedad y Política, posición desde la que ha cubierto buena parte de los acontecimientos del proceso soberanista.

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