Los trabajadores de Beyena creen que el cierre de su planta es "político"

Los trabajadores de la planta de Bilbao de la central lechera Iparlat (anteriormente Beyena) calificaron ayer de "política" la voluntad de cerrar esta planta y llevar su producción a Renedo de Piélagos (Cantabria). Los trabajadores acusaron directamente a José Manuel Goikoetxea, consejero delegado de la firma y ex consejero de Agricultura, y a Eduardo Urrutia, director general y ex viceconsejero del mismo departamento.Los trabajadores temen que el cierre de la planta se realice con posterioridad a que el asunto sea tratado mañana, viernes, en el Parlamento vasco. El colectivo afectado, en torno a 80 trabajadores, considera que no tiene sentido cerrar una planta en la que hace sólo cuatro años se invirtieron 900 millones de pesetas en modernizar las instalaciones.

También fueron críticos con el consejero de Agricultura, José María Gerenabarrena, a quien criticaron unas declaraciones en las que enmarcaba el conflicto en el sector agropecuario, "cuando es puramente industrial", y con el titular de Industria, que "se rasga las vestiduras y tilda de político el cierre de Tabacalera de Guipúzcoa, mientras mira hacia otro lado cuando su propio partido permite hacer lo mismo en Bilbao, con Beyena".