Zabalgarbi no tendrá el permiso municipal hasta principios de año

Zabalgarbi, la promotora de la planta incineradora en el vertedero de Bilbao, no tendrá el permiso de obras del Ayuntamiento hasta principios de año, según aseguraron ayer fuentes municipales. La tramitación de la licencia de actividad y la incorporación del estudio de impacto ambiental demorará el plazo de inicio de obras varios meses más.Esto complica sobremanera la puesta en funcionamiento de la incineradora a lo largo del año 2001, como siempre ha sostenido Zabalgarbi, puesto que el plazo de ejecución calculado oscila entre los 24 y los 30 meses. Sin embargo, un portavoz oficial de la promotora afirmó ayer que se mantiene la previsión, "porque también se pueden acelerar los trabajos. Seguimos manejando que para finales de 2001 la incineradora esté funcionado".

Zabalgarbi, que inició a mediados de 1997 los trámites para ubicar la incineradora en el vertedero de Artigas, se encuentra a la falta de la licencia municipal y la declaración de impacto ambiental por parte del Gobierno vasco. La empresa pidió al Ayuntamiento bilbaíno la licencia de actividad, previa a la de obras, en junio de 1998. Sin embargo, la necesidad de la aprobación del plan urbanístico de Artigas dejó en suspenso este trámite durante más de un año.

En julio pasado, la promotora de la incineradora hizo una nueva solicitud de licencia de actividad. Fuentes del consistorio aseguraron que la concesión de la licencia -un acto reglado, es decir, que debe tramitarse si se cumplen las condiciones técnicas- depende ahora de la incorporación del estudio de impacto ambiental del Gobierno vasco. "Se le han pedido a la empresa unas ampliaciones y cuando el Gobierno dé el visto bueno y conceda la declaración de impacto se incorporarán a la licencia".

"En enero o febrero"

A continuación, se abrirá la fase de exposición pública durante al menos un mes y, tras las alegaciones, se aprobará la licencia de actividad, a la que seguirá la de obras, que se puede conceder en el plazo de unos días. "Calculamos que se podrá tramitar en enero o febrero", sostiene el consistorio bilbaíno. El inicio de los trabajos se produciría, en el mejor de los casos, en febrero o marzo.

La planta incineradora, un proyecto de 23.400 millones de pesetas que pretende quemar anualmente 228.000 toneladas de basuras, se ha visto envuelta en la polémica desde que se anunció su construcción en 1993. Se ha constituido una plataforma contraria, Bizkaia Bizirik, que ha llevado el proyecto a los tribunales al argumentar que no ha sometido a información pública un estudio de impacto y carece de un informe económico-financiero sobre su viabilidad. Aducen también el incumplimiento de la ley al situarse a menos de dos kilómetros de núcleos poblados.

Zabalgarbi defiende la legalidad del proyecto y asegura que "ha pasado tres periodos de información pública".