Alemania se niega a pagar más a los "esclavos" del nazismo
Numerosas organizaciones judías han criticado la oferta realizada por la industria alemana para indemnizar a los trabajadores judíos utilizados como esclavos durante la II Guerra Mundial, algo más de medio billón de pesetas. Mientras el Gobierno alemán ha calificado de "razonable" el ofrecimiento, el portavoz de las industrias, Wolfgang Gibowski, ha advertido de que la oferta realizada "es la mejor que se puede hacer". "Desde el primer momento hemos dicho que pondríamos sobre la mesa todo lo que pudiéramos ofrecer", dijo Gibowski y añadió que no puede haber pagos suplementarios procedentes de los fondos de indemnización que crearán las empresas alemanas.
Sin embargo, el presidente del consejo judío alemán, Michel Friedman, ha pedido al canciller federal, Gerhard Schröder, que se comprometa en la negociación de las indemnizaciones. "Me gustaría que el canciller, que ya está comprometido, pero no de forma muy significativa, haga algo para que se llegue a un resultado", señaló. Para Friedman, la propuesta de la patronal es insuficiente y no constituye más que un primer paso.
El anuncio de una indemnización millonaria para los trabajadores esclavizados se ha visto ensombrecida por una nueva profanación de tumbas en un cementerio judío de Alemania. Cerca de 30 lápidas fueron movidas de su sitio y pintadas con cruces gamadas y eslóganes nazis en el cementerio de Maguncia, según informó ayer la policía.
Además, los muros del cementerio de Alsheim, cerca de Maguncia, aparecieron cubiertas de pintadas pronazis. Las autoridades han ofrecido una recompensa de 2.500 euros (415.965 pesetas) por cualquier pista que lleve hasta los autores.
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