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Un corredor vigilado de 45 kilómetros unirá los territorios palestinos

Israelíes y palestinos pactaron oficialmente ayer la apertura de un "corredor libre" entre Gaza y Cisjordania que facilitará a los habitantes de ambas regiones palestinas trasladarse de una a otra. Las cautelas y exigencias policiales han convertido estos 45 kilómetros de carretera en un inmenso laberinto burocrático, ya que, según se desprende del texto del acuerdo, los usuarios tardarán entre dos y cinco días en conseguir un salvoconducto para un pasaje que sólo estará abierto 10 horas al día.

A partir del próximo domingo 9 de octubre, a las siete de la mañana, se abrirá a los usuarios palestinos ese primer "corredor libre" entre la franja de Gaza y los territorios autónomos de Cisjordania. El pasaje -que unirá la localidad fronteriza de Erez con la estación de Tarkumiyeh, en las cercanías de Hebrón, y será inugurado el próximo domingo-, permanecerá abierto todos los días hasta las ocho de la tarde (hora local). Sin embargo, el acceso a los puntos de partida se cerrará 90 minutos antes para asegurarse de que el corredor quede vacío a la hora prevista de cierre.Los palestinos podrán utilizar esta vía de comunicación a bordo de un autobús o en sus vehículos privados, en cuyo caso sus propietarios podrán obtener de las autoridades israelíes un permiso permanente de utilización de la carretera valedero para tres meses.

Las exigencias israelíes en materia de seguridad han establecido asimismo complicadas verificaciones y registros, tanto en el punto de entrada como en el de llegada del corredor, convirtiendo un viaje de apenas una hora, en un trayecto que llevará dos horas para los autobuses y hora y media para los vehículos privados, según se afirma en el texto del acuerdo.

Tarjetas magnéticas

Queda absolutamente claro que los autobuses viajarán escoltados por un destacamento del Ejército israelí, mientras que los turismos serán vigilados y controlados, a través de ordenador, gracias a unas tarjetas magnéticas que serán colocadas en los parabrisas.A pesar de todas estas exigencias, para la Autoridad Nacional Palestina la apertura de este primer corredor significa una importante mejora con respecto a la situación existente, en la que entrar o salir de Gaza era algo que sólo estaba al alcance de unos pocos privilegiados. Para los palestinos de Gaza, durante estos últimos cuatro años, ha sido mucho más fácil llegar a Cisjordania haciendo un largo recorrido por vía aérea desde Egipto hasta Jordania y luego por tierra al punto de destino, que solicitando el permiso a la policía de Israel para atravesar su territorio.

El acuerdo sobre la apertura fue firmado tras cinco días de intensas negociaciones. El Acuerdo de Wye Plantation, alcanzado hace cerca de un año en Estados Unidos, prevé asimismo la apertura de un segundo corredor, también desde Erez hasta la ciudad de Ramalá, al norte de Jerusalén, pero que difícilmente será inaugurado antes del próximo enero.

Ayer, mientras se firmaba el acta del acuerdo, decenas de militantes pacifistas y de la derecha israelí se manifestaron, en sendas concentraciones, en el centro de Jerusalén en favor y en contra del corredor, sobre el que se vaticinan toda suerte de conflictos.

[Por su parte, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yasir Arafat, acusó duramente al primer ministro israelí, Ehud Barak, de continuar con la colonización judía en Cisjordania, lo que, en su opinión, destruye el proceso de paz, informa France Presse. "Prolongar la colonización destruye el proceso de paz y viola un acuerdo claro que firmé con Isaac Rabin, de que no habría ninguna nueva vivienda judía o ampliación de las colonias ya existentes", afirmó Arafat tras entrevistarse con el presidente de Finlandia, Martti Ahtisaari].

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