"Por ser de un país de secano, el césped nos vuelve locos"
Su planta preferida es la encina, y las niñas mimadas de su jardín privado sus cuatro cycas, unas coníferas arbustivas tropicales. "Existen desde la época de los dinosaurios, son prácticamente fósiles vivientes", explica orgulloso Rosendo Elvira, un biólogo madrileño de 44 años. En 1990 le propusieron poner en marcha el Jardín Botánico Juan Carlos I en el campus de la Universidad de Alcalá. La idea de participar en su gestación le entusiasmó y este verano asistió orgulloso a su presentación al público como un rollizo bebé de 13 hectáreas. Cuando esté terminado tendrá 200. El parque de flora regional ocupará varias hectáreas y acogerá a cuanta planta, ya sea silvestre o de cultivo agrícola, se dé en Madrid.P. ¿Qué es un jardín botánico?
R. Un museo, con la particularidad de que expone material vivo. Como todo museo, cumple cuatro misiones fundamentales: la investigación, el recreo, la divulgación, con el mensaje del respeto a las plantas, y la conservación. Actúa como un banco de semillas y garantiza la supervivencia de especies amenazadas. No se debe descuidar ninguna, incluida la de recreo. Si no cumple una función social, la gente no lo querrá, y será difícil financiarlo.
P. ¿Qué función social cumple el de Alcalá?
R. En los últimos cinco años han pasado por aquí 4.000 escolares madrileños para descubrir las plantas medicinales o qué es la apicultura. Al público en general le ofrecemos un lugar tranquilo para el disfrute y conocimiento de la diversidad vegetal. En un parque urbano no suele haber más de 40 especies diferentes; aquí puede haber hasta 4.000.
P. ¿Cuáles son ahora mismo las más singulares?
R. En el arboretum tenemos las moreras de papel y el araar, un ciprés de la zona de Cartagena y los montes del norte de África. Y en los invernaderos, por ejemplo, el peyote, un cactus alucinógeno.
P. Volviendo a los parques, ¿no se pone demasiado césped?
R. Como somos de un país de secano, el césped nos vuelve locos. La gente quiere césped y para disfrutarlo, para tumbarse, y no para verlo al borde del camino. Con los episodios de sequía ha tomado fuerza la xerojardinería: cómo hacer jardines en lugares cálidos, con plantas crasas y otros tapizantes, sin césped. Pero una cosa es lo que se debería hacer en una región seca como Madrid, y otra, lo que quiere la gente.
P. ¿En Madrid hay especies vegetales amenazadas?
R. Sí, en Alcalá tenemos la Nepeta beltrani, una hierba que crece en los cerros del Henares y que está en peligro.
Real Jardín Botánico Juan Carlos I, carretera de Barcelona, kilómetro 31.900, autobuses 2 y 3 desde Alcalá de Henares o en tren, C2, apeadero del campus. Arboretum de 8.30 a 21.00. Invernaderos y jardín taxonómico, de 8.30 a 14.30, de lunes a viernes. Teléfono 91 878 92 39.
