Argentina y Brasil mantienen la 'guerra' comercial por el calzado

Los gobiernos de Argentina y Brasil dejaron ayer en manos de los empresarios la solución del conflicto que mantienen respecto al comercio de calzado, que se inició como consecuencia de las trabas argentinas a la importación de ese producto brasileño. Las negociaciones permanecen estancadas debido a que los fabricantes argentinos quieren que se fije un cupo de ingreso de siete millones de pares de calzado, cuatro millones menos que el que piden los brasileños sobre la base de las cifras colocadas en el mercado local a lo largo del año pasado.El conflicto se desató por la decisión argentina de aplicar licencias para la importación de calzado y exigir a los fabricantes que gestionen certificados de calidad como condición previa a la entrada del producto en el mercado local. Brasil, segundo productor mundial de calzado con 600 millones de pares al año, sostiene que estas medidas son una barrera no aduanera, mientras que Argentina afirma que sólo busca proteger a los consumidores.

En represalia, el Gobierno de Brasil anunció anoche la cancelación de las ventajas comerciales para 400 productos argentinos, que "en 24 horas" pasarán a tener el mismo régimen que se aplica a las importaciones brasileñas de terceros países, según informa la agencia Efe.

Éste es sólo uno de los muchos conflictos que se han desatado entre los socios mayores del Mercado Común del Sur (Mercosur). Argentina y Brasil mantienen además serias diferencias en el comercio de textiles, azúcar y productos siderúrgicos, entre otros, que se agravaron a partir de enero pasado, cuando comenzó la depreciación de la moneda brasileña.

En este sentido, ambos países consideran que un acuerdo entre las cámaras de fabricantes de calzado facilitaría la solución de otros litigios comerciales aún pendientes