Dos homosexuales británicos tendrán gemelos con una madre "alquilada"
Barrie Drewitt y Tony Barlow, dos homosexuales británicos que mantienen una relación estable desde hace 11 años, serán padres el próximo enero gracias a la colaboración de Rosalind Bellamy, una madre de alquiler estadounidense embarazada de sus gemelos tras una fecundación artificial.Aunque las leyes de adopción están abiertas en el Reino Unido a cualquier "candidato adecuado", los servicios de asistencia social suelen rechazar a los del mismo sexo. Drewitt y Barlow sufrieron dicha suerte y por eso sus hijos -un niño y una niña- nacerán en Estados Unidos y serán adoptados allí de inmediato. Como se trata de los padres biológicos, las autoridades británicas sólo les exigirán que los inscriban como descendientes suyos en cuanto regresen.
Presentados ayer por la prensa británica como una pareja "modélica y acaudalada" que ha invertido 50 millones de pesetas en su paternidad, Barrie Drewitt, de 30 años, y Tony Barlow, de 35, defienden su decisión de ser padres con un argumento en apariencia incontestable: "Muchas parejas heterosexuales tienen hijos no deseados y es un desastre. Nosotros siempre hemos querido ser padres". Esperan que su desahogada situación económica -la venta de su empresa de análisis de cosméticos les ha hecho millonarios- facilite la educación y cuidados de los bebés.
Semen de ambos
Lograrlo no les ha resultado nada fácil. Rechazados como padres adoptivos por las autoridades de Essex, donde residen, decidieron inscribirse en la lista de espera de una asociación de California especializada en partos de alquiler. A través de la misma obtuvieron primero los óvulos de una donante y más tarde conocieron a Rosalind Bellamy, de 32 años, que ya había tenido antes gemelos para una pareja estéril. Madre a su vez de cuatro hijos propios, en esta ocasión espera mantener una relación estrecha con ambos. El contrato de subrogación que ha firmado le impedirá, no obstante, reclamar a los gemelos cuando nazcan.
La parte clínica de esta fecundación ha sido también algo especial. De los cuatro embriones implantados en el útero de la madre de alquiler, dos fueron fertilizados con el semen de Drewitt. Los otros dos recibieron el de Barlow. Hasta que puedan hacerse las correspondientes pruebas de ADN, no podrá saberse de quién son hijos biológicos los gemelos. Sea cual fuere el resultado, llevarán ambos apellidos.
Una vez informado de la situación, el Ayuntamiento de Essex ha asegurado que serán tratados como cualquier otro padre local. Pero las críticas no se han hecho esperar. Valerie Richards, directora de la asociación Preocupación por la Familia y la Juventud, especializada en relaciones parentales, ha dicho ya que la pareja "ha antepuesto sus deseos al bienestar de los niños". A Richards le inquieta que los niños carezcan del entorno adecuado y les falte una madre.
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