La Seguridad Social privatizará su servicio de atención telefónica
La administración de la Seguridad Social ha abierto el proceso de privatización del Servicio de Gestión y Atención Telefónica (Geste) de Madrid. El Ministerio de Trabajo entiende esta iniciativa como un intento de mantener la calidad del servicio. El sindicato UGT la considera, sin embargo, una actitud irresponsable de las autoridades, que dejan en manos privadas los datos confidenciales recogidos en los ficheros de la Seguridad Social.El Geste es un servicio gratuito de atención telefónica que desde hace dos años atiende las dudas de los usuarios de la Seguridad Social. Una de las informaciones que facilita es la referente a la vida laboral de particulares y empresas, con la previa identificación del interesado. Según UGT, traspasar este servicio a una empresa privada supondrá la pérdida de garantías de confidencialidad de estos datos. Por esta razón, el sindicato estudia iniciar acciones judiciales que prueben la ilegalidad de esta medida.
El Ministerio de Trabajo considera prematuras estas conclusiones, ya que hasta ahora lo único que existe es un pliego de condiciones por el que se convoca a las empresas a presentar sus proyectos para adjudicarse ese servicio. El anuncio se publicó en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el pasado 16 de julio.
Fuentes del ministerio aseguran que una vez se traspase el servicio, hasta ahora prestado por funcionarios públicos, se concretarán las medidas que garanticen la confidencialidad de los datos. Según Trabajo, "la Tesorería General de la Seguridad Social es la principal interesada en la privacidad de esas informaciones". A pesar de este llamamiento a la calma, el sindicato ya se ha dirigido al Defensor del Pueblo para que defienda "el honor y la intimidad personal y familiar de los ciudadanos".
Sólo en la capital
Aunque el Geste opera en todo el país, el plan de privatización sólo se abrirá de momento en Madrid. Trabajo justifica esta medida por la incapacidad de los funcionarios para prestar un servicio que los desborda. Desde su creación, en 1997, el Geste ha pasado de recibir 260.000 llamadas anuales a las 426.000 registradas sólo en el primer semestre de 1999. Según el ministerio, lo único que se pretende es mantener la buena calidad de un servicio para el que el personal existente resultaba ya escaso.UGT arguye que los 166 millones de pesetas que el ministerio pretende destinar al proceso de privatización podrían haberse empleado en contratar más funcionarios para atender la fuerte demanda del servicio de atención telefónica. Para Gloria Mora, del departamento de Trabajo del sindicato, esta medida responde únicamente a la vocación privatizadora del Gobierno.
El ministerio asegura que el cambio de titularidad del Geste no afectará al servicio que presta, aunque UGT teme que la privatización encarezca los costes de mantenimiento.
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