La comunidad internacional se compromete a donar 325.000 millones de pesetas a Kosovo
Los 57 países representados ayer en Bruselas en la primera conferencia de donantes para reconstruir Kosovo se comprometieron a aportar ayudas a fondo perdido por valor de 2.084 millones de dólares (cerca de 325.000 millones de pesetas al cambio actual). Las instituciones y países participantes no hicieron público el desglose de esas aportaciones ni por su procedencia ni por su destino. No hay una estimación definitiva de lo que costará la reconstrucción de la provincia ni sobre sus necesidades humanitarias. Sí existen, en cambio, algunas cifras estimativas.
La Comisión Europea evalúa en 1.120 millones de euros (185.000 millones de pesetas) el coste de la reconstrucción de las 120.000 viviendas dañadas o destruidas. El coste definitivo de la reconstrucción se conocerá en octubre, cuando la conferencia de donantes vuelva a reunirse.De la reunión de ayer y de las decisiones aprobadas horas antes por la Comisión Europea se desprende que la comunidad internacional destinará de aquí al 31 de diciembre próximo 300 millones de euros (50.000 millones de pesetas) para la reconstrucción física, 200 millones de dólares (31.000 millones de pesetas) a ayuda humanitaria básica y 45 millones de dólares (7.000 millones de pesetas) a gastos para la formación de una administración interina. El resto de las aportaciones se consumirán a partir del año 2000.
La conferencia de donantes divide en cuatro grandes bloques las necesidades financieras de Kosovo: humanitaria, reconstrucción física, una administración pública (que incluye la puesta en marcha de servicios públicos) y desarrollo económico de la provincia.
Ayuda humanitaria
La necesidad más inmediata es la ayuda humanitaria ligada a los refugiados, que en un 90% han regresado ya al país. De la ayuda total de 2.082 millones de dólares comprometida, en torno a 500 millones de dólares están destinados a ayuda humanitaria. La oficina europea, ECHO, ha destinado 378 millones de euros de su presupuesto a acciones humanitarias en los Balcanes.El grueso del esfuerzo financiero se destina a la reconstrucción física de la provincia, pero la parte del león de esta partida no será necesaria hasta el año próximo. Se trata de reconstruir las viviendas, las escuelas, las instalaciones sanitarias y eléctricas, conducciones de agua y las infraestructuras locales en general. La comunidad internacional estima que de las 206.000 casas verificadas en 1.400 poblaciones, cerca de 120.000 están dañadas, un tercio de ellas gravemente. Reparar esas viviendas costará 1.120 millones de euros (más de 185.000 millones de pesetas). A esa cantidad hay que sumar los trabajos de urgencia en escuelas (20 millones de euros), dispensarios y hospitales (4), electricidad rural (9,6), agua (4,8) o transporte (31,5 millones de euros).
El desarrollo económico de la provincia no podrá afrontarse en serio hasta que estén más avanzadas las tareas de reconstrucción y se resuelvan una serie de incógnitas políticas, como el estatuto de Kosovo y las características de su presupuesto: administración internacional, regional o compartida con la República Federal de Yugoslavia. El Banco Mundial propone relanzar primero la economía rural, las empresas privadas, las redes de infraestructuras, la reconstrucción de los centros urbanos y el apoyo a las instituciones de asistencia social.
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