Un consorcio institucional se encargará de recuperar el estanque desecado de Ivars d"Urgell
Un consorcio institucional creado ayer dará el impulso definitivo al proyecto de recuperación de estanque d"Ivars d"Urgell (Pla d"Urgell), un lago natural más grande que el de Banyoles que fue desecado hace casi medio siglo para poder cultivar las tierras situadas en la zona inundada. La Generalitat prevé reinstaurar el ecosistema anterior y convertir el estanque en la tercera zona húmeda de Catalunya tras el Delta del Ebro y los Aigüamolls del Empordà. Las primeras gestiones para recuperar el estanque se iniciaron hace diez años, pero hasta ayer no se pudo constituir el consorcio porque los 19 propietarios de las fincas afectadas por el proyecto impugnaron el Plan Especial de Protección del Medio Natural y del paisaje del estanque aprobado en noviembre de 1995 por la Generalitat, a la que los tribunales le han dado ahora la razón. Los recurrentes instaron la nulidad del plan al considerar que al tratarse de una laguna desecada naturalmente no había ningún espacio natural a proteger. Sin embargo, el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya entiende que concurren en ese paraje coexisten diversos ecosistemas y múltiples valores naturales que conviene conservar. "Lo que no cabe es exigir a un ecosistema, para que sea merecedor de la consideración de espacio natural a proteger, la reunión de características florales propias de la amazonia, faunísticas de la sabana o paisajísticas de los fiordos, existiendo, antes al contrario, zonas áridas e incluso desérticas merecedoras de igual protección". aiEl consorcio está formado por los ayuntamientos de Ivars d"Urgell y Vila-sana, el Consejo Comarcal del Pla d"Urgell, la Diputación de Lleida, los departamentos de Medio Ambiente y Agricultura y la Universidad de Lleida. En el proyecto también colabora la Fundación Territorio y Paisaje de La Caixa de Catalunya. Su principal objetivo será negociar con los propietarios la compra de las 157 hectáreas afectadas, para lo cual dispone ya de 500 millones. Los dueños piden que por sus fincas se pague lo mismo que por las expropiadas por la autovía -cinco millones por hectárea-, pero la oferta de la Generalitat es inferior. El estanque, a caballo entre los términos de Ivars d"Urgell y Vila-sana, tiene tres kilómetros de longitud, un kilómetro de ancho, una orilla perimetral de 6 kilómetros. Su profundidad media de tres metros permitirá que pueda recorrerse en barca.
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