El rector de la URV, interrogado a causa del reglamento lingüístico

El juez interrogó ayer al rector de la Universidad Rovira i Virgili (URV), Lluís Arola, que compareció en calidad de imputado por un presunto delito de prevaricación y actuación contraria a los derechos civiles. La profesora de Gramática de la universidad, Josefina Albert, fue la promotora de la denuncia tras haber sido apartada del tribunal de corrección de las pruebas de Selectividad por haber acudido al Defensor del Pueblo después de que a un alumno se le negara un ejemplar del examen en castellano. La declaración de Arola se prolongó más de lo previsto debido a que tanto el juez como el fiscal hicieron especial énfasis en el conocimiento de la normativa interna de la universidad. El razonamiento de Arola respecto a la decisión de apartar a Albert (y por idéntica causa al profesor José María Fernández) de las correcciones de las Pruebas de Acceso a la Universidad se fundamenta en la normativa de la URV, que establece que cualquier incidencia debe ser comunicada en primera instancia a los órganos internos establecidos a tal efecto, antes de acudir a otros organismos. Arola, que fue llamado a declarar junto con el vicerrector Estanislau Pastor y el coordinador de Selectividad, Joan Igual, señaló que comparecer ante un juez "no es una situación agradable", aunque reconoció el derecho de toda persona a reclamar ante la justicia. El rector, que había recibido el apoyo de la Junta de Gobierno, ratificó su convencimiento de que la universidad había actuado de forma correcta y enfatizó que la investigación judicial no se basa sobre los usos lingüísticos, sino por apartar a una profesora que había incumplido la normativa.