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La juez levanta el secreto sobre los papeles requisados a Folchi

La juez que instruye el caso Torras, Teresa Palacios, acordó ayer levantar el secreto sobre los documentos requisados en el despacho del abogado barcelonés Juan José Folchi y de los ex altos cargos de Hacienda José María Huguet y Ernesto de Aguiar durante el registro realizado el pasado 26 de mayo.

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Entre lo requisado en el despacho de Folchi hay cuatro documentos que el abogado pensaba aportar en su declaración de hoy como prueba de que Aguiar prestó servicios a Torras y Javier de la Rosa. Según Folchi, estos servicios explicarían los pagos que Aguiar, y también Huguet, recibieron en Suiza. Algo que los dos ex altos cargos niegan. La correspondencia está formada por cuatro documentos. El más reciente es un fax, enviado por Aguiar a Folchi el 22 de junio de 1989, en el que le envía una copia del decreto de Economía acordando conceder exenciones de impuestos a la fusión entre las empresas químicas Cros y ERT, de la que nació Ercros. La aprobación de esas exenciones se había publicado el día anterior en la prensa.

Los otros tres documentos se refieren a gestiones realizadas por Folchi, en nombre de De la Rosa, ante Aguiar y el entonces secretario de Estado de Hacienda, Josep Borrell. El primero de ellos es una carta de Folchi a Borrell, con fecha 30 de octubre de 1987, en la que le pide al secretario de Estado que le reciba para aclarar la situación de su representado.

Según Folchi, que comienza su carta recordando "nuestra última conversación", en esas fechas existía "un factor de incertidumbre que entiendo perturba la buena marcha de las operaciones del grupo [KIO, propietario de Torras] en España y que resulta de las continuas referencias en determinados medios de comunicación y en círculos "habitualmente bien informados" a la existencia de investigaciones en curso que afectan, o pueden afectar en un futuro, a un significativo directivo del grupo en España y concretamente a De la Rosa".

Folchi se refiere a posibles investigaciones sobre la gestión, a principios de los ochenta, de De la Rosa al frente del Banco Garriga Nogués (BGN), filial catalana de Banesto, en el que ocasionó pérdidas de más de 100.000 millones.

El abogado explica que las informaciones sobre supuestas investigaciones publicadas en los medios "apuntan a la existencia, dentro del área de competencia del Ministerio de Economía y Hacienda, de un expediente de investigación en curso respecto a la ortodoxia en la gestión del BGN". Finalmente, pide explícitamente una reunión con Borrell y "que igualmente agradeceré pudiera usted confirmarme o desmentirme la existencia de la referida investigación llevada a cabo por funcionarios dependientes del Ministerio de Economía y Hacienda".

El segundo documento lleva sello de la Delegación de Hacienda en Cataluña y fecha 2 de octubre de 1987, probablemente un error, pues el momento es inmediatamente posterior a la primera misiva, es decir, el 3 de noviembre. Es una carta de Aguiar, que en esa fecha era delegado especial en Cataluña, a Folchi. En ella le informa de que ha enviado la carta de Folchi a Borrell por vía urgente y que él mismo ha escrito una al secretario de Estado. Aguiar reproduce cuatro párrafos de su carta al secretario de Estado en la que dice que "en el ámbito de las empresas domiciliadas en Cataluña no se ha producido, por ningún órgano del Ministerio de Hacienda, ninguna actuación de carácter fiscal que venga motivada por actuaciones de Javier de la Rosa. En sentido contrario, tembién debo informarte que de inguna actución de las realizadas (...) se ha desprendido, hasta el momento, derivación alguna que le afecte particularmente".

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