Protestas de peregrinos por el cierre de una iglesia leonesa del Camino
Un litigio de competencias impide su apertura
La iglesia románica de Santiago en Villafranca del Bierzo (León), al pie del Camino, uno de los monumentos más singulares de la ruta jacobea, se encuentra cerrada desde el pasado mes de enero por un cruce de competencias, en el que se escudan las diferentes administraciones públicas, y la falta de presupuesto. Una desidia de las instituciones públicas que ha provocado la indignación y las quejas de los peregrinos, cuando Galicia ha gastado miles de millones de pesetas en la promoción del Camino de Santiago y del Año Santo Compostelano en el primer semestre de 1999. Ayer, ni la Consejería de Cultura de la Junta de Castilla y León, ni la Diputación provincial ni la diócesis de Astorga, propietaria del monumento, pudieron aclarar esta situación. Según la tradición medieval, la puerta del Perdón de la iglesia leonesa de Santiago, del siglo XII, sólo se mantiene abierta los 12 meses del Año Santo, el resto del tiempo permanece cerrada a cal y canto. La apertura de la puerta se produce a las 24.00 del día 31 de diciembre, es decir, nada más comenzar el Año Santo, y se cierra 12 meses más tarde a la misma hora.
En el acto protocolario de apertura de la puerta del Perdón está presente el obispo de la diócesis de Astorga, a la que pertenece la iglesia, párrocos y numerosas personalidades provinciales y locales relacionadas con el mundo de la cultura y la política. El pasado día 31 de diciembre, la puerta del Perdón se abrió e inmediatamente se cerró.
Un privilegio del papa Calixto III concedía a los peregrinos enfermos o impedidos que traspasaban la puerta del Perdón la misma indulgencia y favores que hubieran obtenido llegando a Santiago, lo que, desde entonces, igualó en valores espirituales a la localidad berciana con Santiago de Compostela.
Desde enero
El cierre de esta iglesia de Villafranca del Bierzo provoca desde enero numerosas protestas de los peregrinos españoles y extranjeros que llegan a Villafranca ansiosos por conocer el monumento del que hablan las guías del Camino. Las quejas se han hecho llegar a la Junta de Castilla y León, más aún cuando al pie del monumento personal contratado por el Gobierno autónomo hace una encuesta sobre varios aspectos del Camino. Jesús Arias, propietario del albergue de peregrinos situado junto a la iglesia, asegura que ha tenido la llave del monumento jacobeo durante los últimos 26 años. Ahora, una vecina ha tomado el relevo. "No entiendo cómo puede pasar esto. Sin más, me quitaron la llave, y la gente viene y quiere ver la iglesia, lógico". Remedios Jiménez, una de las hospitaleras del albergue, muestra su perplejidad: "Llevo 15 días aquí y es impensable que algo así pueda pasar en otro lugar".
En Zamora, la Diputación ha firmado en abril un convenio con la diócesis de Astorga para abrir al público varias ermitas e iglesias, según el portavoz del obispado. En la provincia de León, un convenio similar está aún sin suscribir. Mario Guerra, portavoz de la Diputación en el Bierzo, del PP, desconocía ayer la situación de la iglesia de Santiago. Una docena de monumentos de la provincia se encuentran en situación parecida a la iglesia de Santiago.
Babelia
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