La Plaza Mayor de Salamanca recupera su policromía

Los medallones de los arcos de la Plaza Mayor de Salamanca están recuperando la policromía que, según está documentado, lucieron en el siglo XVIII. Los criterios de intervención ya han originado algunas discrepancias, tanto por la aplicación de pintura como por las diferencias de tonos advertidas, pues en tres casos la policromía es diferente a la aplicada a los restantes medallones que figuran en los pabellones Real, al Este, y de San Martín, al Sur.El director de la restauración, el arquitecto Alberto López Asenjo, ha señalado que los criterios aplicados se han decidido "tras analizar con el mayor rigor y detalle las situaciones existentes". Así, se ha documentado que en el caso de tres medallones, los de los reyes Carlos V, Felipe II y Fernando VI, se mantienen restos de la policromía que se aplicó una vez que los talló Alejandro Carnicero hacia 1735. "Básicamente consiste en que se pinta de dorado, con pan de oro, la orla circular que enmarca la figura, mientras que el fondo es azul claro y todo el busto de los reyes aparece con ropajes de tonos variados, verdes, azules, colores piedra o encarnadura en las partes de la anatomía", indica el arquitecto.

Pero cuando unos 70 años después, durante el reinado de Carlos III, se modificaron los criterios estéticos, esos medallones que reproducen reyes fueron pintados con una orla en azul oscuro y el interior tipo camafeo, con fondos azul muy claro y el busto todo en blanco. Esta policromía fue la que se aplicó por primera vez a los medallones con guerreros y capitanes célebres del pabellón de San Martín.

En el momento de la actuación actual, a cargo de Mercedes Cifuentes, sólo se ha encontrado esa policromía "rica" en tres casos y por eso las efigies de Carlos V, Felipe II y Fernando VI ofrecen un tratamiento pictórico diferente. Se pretende mantener el tono que aparece sobre los medallones una vez retirado el polvo de los siglos. Sin embargo, no se pintarán, a pesar de que también estuvieron policromados, los medallones que fueron raspados hace ocho años, en medio de una fuerte polémica de políticos y técnicos.