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Las vasectomías doblan por primera vez a las ligaduras de trompa en Madrid

Sólo 27 de las 2.377 operaciones del año pasado fueron en hospitales

Los varones madrileños han tomado las riendas en materia de política familiar. A lo largo de 1998 se practicaron en toda la Comunidad de Madrid un total de 2.377 vasectomías, lo que representa algo más del doble que el número de ligaduras de trompa registradas: 1.136. Los expertos han coincidido en señalar que estos datos son "espectaculares" y reflejan un radical cambio de mentalidad entre los hombres, que se han convencido de que la planificación familiar también es "cosa suya". Éstos son los primeros datos que la Dirección Provincial del Insalud en Madrid maneja en toda su historia sobre vasectomías y ligaduras, ya que estas operaciones se englobaban hasta ahora en estadísticas más amplias de andrología y ginecología. Los profesionales percibían "un cierto incremento" en la implicación de la mitad masculina de la pareja, pero no se imaginaban que las esterilizaciones de los hombres superaban en un 100% a las del sexo femenino.La vasectomía presenta la enorme ventaja de ser una intervención muchísimo más sencilla que su equivalente femenino. Consiste en practicar una incisión en el conducto deferente, el camino por el que los espermatozoides alcanzan la uretra desde los testículos.

El varón vasectomizado sigue produciendo semen, pero ya estéril, ya que la célula reproductora no participa de la eyaculación. Esta operación se ventila en apenas 10 minutos y el paciente puede volver a casa por su propio pie. Por eso, la inmensa mayoría de vasectomías (2.350) figuran en las estadísticas de cirugía mayor ambulatoria, mientras que sólo las 27 restantes requirieron de ingreso hospitalario. Intervención sencilla

Por su parte, la operación de ligadura consiste en inutilizar la trompa de Falopio, el conducto que comunica el útero con el ovario. Y el proceso es bastante más complicado: sólo 497 intervenciones pudieron realizarse sin ingreso, mientras que las otras 639 mujeres tuvieron que ocupar cama en el hospital correspondiente.

Enrique Álvarez, jefe de la unidad de Andrología del hospital 12 de Octubre desde hace 23 años, ha sido testigo privilegiado de esta evolución de las mentalidades. "Cuando empecé, ésta era una especialidad mal vista incluso dentro de la propia institución. Todo lo que tuviera que ver con el semen estaba estigmatizado", recuerda. Y añade: "Con los pacientes, lo mismo. Al principio, la gente venía con las orejas gachas. Ahora, hay veces que se explayan con tanto detalle que les tienes que parar los pies...".

Álvarez reconoce que cada vez son menos las veces que escucha planteamientos del tipo "Éstas son cosas de mujeres porque ellas son las que se quedan embarazadas", o cosas parecidas. "En circunstancias normales, la vasectomía es una alternativa mucho más ventajosa", insiste, "no sólo por la extraordinaria sencillez de la operación y porque es reversible, sino también porque rara vez aparecen complicaciones: con aplicarse un antiinflamatorio y llevar suspensorio un par de días, está todo resuelto".

Por último, el jefe de la unidad de Andrología del hospital 12 de Octubre confirmó que la inmensa mayoría de las parejas que visitan su consulta lo hacen después de haber tenido a su segundo bebé.

"Hay también algún caso raro de jóvenes de 21 o 22 años, sin descendencia, gente inculta en materia sanitaria que llega aquí con la sensación de que esto de la vasectomía es como una cremallera que se abre y se cierra", aclaró Álvarez.

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